POR FRANCISCO SALA ANIORTE, CRONISTA OFICIAL DE TORREVIEJA
EN ORIHUELA
El jueves, 29 de mayo de 1924, festividad de la Virgen de la Ascensión, se enfrentaron nuevamente en Orihuela los ya rivales equipos representativos de Orihuela y Torrevieja. En anteriores encuentros había quedado siempre vencedor el equipo oriolano, pero los últimos triunfos obtenidos por el C. D. Torrevieja sobre otros clubs importantes de la región, hizo suponer que se iba a ver un encuentro muy interesante.
En realidad el partido fue bastante soso y, aun cuando destacó alguna jugada bonita del conjunto gris, predominó la violencia en el juego y un peloteo bastante insulso.
Cinco tantos fueron anulados (tres al Torrevieja y dos al Orihuela) manteniéndose el empate a cero hasta los últimos momentos. El tanto de la victoria lo consiguió el Orihuela merced a un pase de Yborreta a Aníbal que, centrado por éste, fue rematado por Luna.
El dominio fue alterno toda la tarde. El equipo del Torrevieja jugó muy bien y con mucho entusiasmo. C. Vaso, después de haber sido varias veces amonestado por su juego sucio, fue expulsado por el árbitro. Los oriolanos no dieron todo el rendimiento de que eran capaces. El árbitro estuvo bien, aunque algo escrupuloso.
EN TORREVIEJA
Toda la afición oriolana se trasladó a la villa del Torrevieja al siguiente domingo, pasando de treinta los vehículos que tomaron parte de la expedición. A las seis de la tarde el campo del Torrevieja presentaba un aspecto magnífico; más de tres mil espectadores se hallaron congregados, descollando la hermosura de las mujeres torrevejenses y de algunas bellas oriolanas.
A las órdenes de J. García Vaso se alinearon los equipos, faltando al Orihuela su defensa Peñafiel.
El partido desde los primeros momentos se llevó a todo tren, jugándose muy duro. Una melé producida ante el marco torrevejense fue despejada, rodando por el suelo seis u ocho jugadores. El encuentro estuvo muy igualado y resultaron muy interesantes los dos tiros defensivos que salvaron situaciones comprometidas.
Terminó el primer tiempo empate a cero.
En la segunda parte siguió el juego nivelado. Después de varias arrancadas a una y otra puerta sin consecuencias, ante un avance oriolano la defensa torrevejense no pudo contrarrestar la presión del ataque contrario y Luna marcó el primer tanto.
Un nuevo ataque oriolano, muy bien dirigido por por Lunas, fue rematado por Octavio con un fuerte cañonazo que fue fuera.
El árbitro expulsó a Díe, por entrar sucio a Vaso. Estuvo bien que se cortara el juego sucio, pero no pareció tan bien que se expulsara a Mas y Gil sin llevar la pelota y que se entrara violentamente, dándole una patada en el pecho, que le hizo permanecer en el suelo dos minutos. ¿Por qué no se expulsó también a estos jugadores? El capitán del equipo oriolano protestó y mandó retirarse a sus jugadores, pero, después de una prolongada discusión, el árbitro rectificó y continuó el partido.
A partir de ese momento fue el juego favorable al Orihuela. Un jugador torrevejense hizo una mano que el árbitro novio o no quiso ver e inmediatamente otro compañero hizo otras y a renglón seguido un defensa despejó con el brazo en el área fatídica. Todo esto sucedió en menos en menos tiempo que contamos y de forma que el público lo vio indignado. Iborreta, capitán del equipo del equipo oriolano, se quejó al árbitro, pero éste no concedió el penalti. Aquel retiró el equipo en vista de la parcialidad del hombre de negro. Sólo faltaban diez minutos para terminar.
Una vez abandonado el campo por el equipo visitante, el equipo local se alineó y marchó decidido hasta la puerta contraria, metiendo el balón de un tiro imparable; imparable porque ya no tenían delante la barrera infranqueable de Mas, Armando y Zerón. Repitieron la misma operación introduciendo el balón nuevamente con suma facilidad, oyéndose aplausos irónicos de parte del público a la pantomima.
El equipo oriolano jugó bien, sobresaliendo Lucas, Iborreta, Armando y Luis Mas que hizo pasadas inverosímiles.
El público provocó infinidad de conflictos, saliendo del campo en medio de una gran bronca; durante el partido insultó a los jugadores forasteros y después apedreó la casa donde estaban desequipándose. Los espíritus serenos y amantes del deporte no pudieron menos que protestar de la incorresta actitud del público.
Los jugadores forasteros salieron acompañados de las autoridades y escoltados por la Guardia Civil, que vigiló las calles por donde habían de pasar los coches de los aficionados oriolanos.
El primer once del Orihuela Deportiva hizo su entrada triunfal en Orihuela en medio de una gran ovación y días después fue obsequiado con un banquete por sus admiradores.
RESUMEN
La verdad es que era presumible que en los momentos de exaltación y ofuscación de los partidos se lanzaran ofensas y se vociferaran desaforadamente. Se esperaba también que hubiesen muchos aficionados que tuvieran mucho interés en presenciar estos partidos. La sorpresa fue que desde los palcos ocupados por lo más distinguido de las localidades –tanto en Orihuela como en Torrevieja- se arrojaran sillas al paso de los jugadores…
Se creyó que se lucharía en una buena lid y que los insultos se atribuirían a los más incultos y exaltados, a una minoría de chiquillos y huertanos. La verdad es que las aficiones parecieron energúmenos.
Echado en cara fueron desatenciones de la directiva del Orihuela que cobró en el descanso las bebidas consumidas en el bar del campo de fútbol por los jugadores del Torrevieja, siendo así que tuvieron que pagar hasta unas naranjas. Mientras que en Torrevieja estaba preparado al equipo visitante, como a todos los que venían un lunch en el Casino.
Un muy mal rollo ente los dos club deportivos de Orihuela y Torrevieja. Un desgraciado encuentro entre las dos aficiones.
El 15 de junio, para quitar malos sabores se jugó, en el magnífico campo torrevejense un encuentro entre los primero equipos Club Deportivo de Totana y el Torrevieja F.C., venciendo el equipo local por 6 tantos a 1. El partido se celebró con la mayor armonía tanto por parte del público, como de los jugadores. Los torrevejenses estuvieron todos acertadísimos distinguiéndose Torres, Juanito, Vaso, González y Dols. De los totaneros se distinguieron los defensas y el medio centro. Fueron obsequiados por un espléndidamente por los torrevejenses. El árbitro, señor Esteban, estuvo muy acertado e imparcial.
(Continuará)
Fuente: Semanario VISTA ALEGRE.Torrevieja, 23 de agosto de 2014