POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Bueno, pues miren por donde tenemos aquí tres «cosas» aparentemente independientes entre sí pero con un nexo común: el fuego.- Sigamos un orden:
MAGOSTAR y/o amagostar, en su significado de asar castañas (con o sin fiesta posterior) es palabra con dos posibles orígenes latinos: «magnus ustus» (fuego grande) o «magum ustum» (fuego mágico).
Las ALMAS EN EL PURGATORIO sufren temporalmente el castigo del fuego para perdón de sus «pecadillos» en la Tierra y suplican nuestras oraciones en indulgencia de su pena:
«¡Ay, ay!, que aquí me abraso.
¡Ay, ay!, que aquí me quemo!
Por Dios te pido, cristiano,
que me saques de este fuego.
Los BENZOPIRENOS, hidrocarburos aromáticos policíclicos, deben su nombre a que su estructura molecular deriva del «anillo bencénico» y su presencia es abundante en los humos procedentes de combustiones relativamente incompletas («piros», en griego, tiene significado o relación con el fuego y el calor).
Fue San Odilón, abad de Cluny, quien en el siglo XI, propuso la celebración del DIA DE LOS DIFUNTOS para el 2 de noviembre, inmediato a la conmemoración de TODOS LOS SANTOS, fiesta establecida por Gregorio IV en el año 835, aunque sus orígenes se remontan a los primeros tiempos del cristianismo.
Esa doble festividad, TODOS LOS SANTOS -DIA DE DIFUNTOS- tiene en Asturias un vertiente «folixera», quizá con raíces celtas del «Samhain», que son los AMAGÜESTOS, AMAGOSTOS, MAGOSTOS DE CASTAÑAS, simbiosis de hoguera, castañas , canciones y bailes.
Así lo contaba «Pachu´l péritu»:
«Na llomba del pradón de Pin de Llera,
que segaron los mozos con gadañes,
vaciaron tres macones de castañes
pa´n riba d´elles entamar foguera.
Faciendo l´escalientu con llumbrera,
charon rozu, morgazu, paya y cañes;
i en fuebu que llumaba les montañes,
saltaben chamuscando la culera…»
Y lo completaba «Marcos del Torniello»:
«Depués de que apañaron lleña reseca
por entre la pinera de la Moxeca,
meciendo les caxines de fabaraca
con los resecos artos de la furaca,
ficieron en metanes de la campera
con todos los honores de la foguera,
una fornada bona, que nes entrañes
tuviés el amagüestu de les castañes
Y ahora fíjense ustedes en esta tradición muy antigua: mozos y mozas, finalizado el amagüestu, dejaban siempre algunas castañas asadas, cerca del fuego, para «la xinta de los defuntos».
También ellos tenían derecho a disfrutar de la fiesta.
¡Oiga! ¿Y qué pintan aquí los benzopirenos? ¡Demonios!
Si hay fuego, hay humos; y si hay humos, hay benzopirenos. Sí, sí; esas sustancias malévolas contra las que nos alerta la O.M.S.
Yo, ¿qué quieren que les diga? Las castañas asadas «al benzopireno» me sientan de maravallia. Y complementadas con sidra dulce, como manda la tradición, mejor que mejor.