POR JOAQUÍN CARRILLO ESPINOSA, CRONISTA OFICIAL DE ULEA (MURCIA)
D. Sebastián de Rueda y Benavides, nació en Granada en el siglo XVII- año 1621-. Sus descendientes llegaron a Moratalla, Cieza y Murcia. Una rama se ubicó en Ulea, en el año 1690, encabezada por D. Sebastián de Rueda y Benavides y Almeida.
En aquella época Ulea tenía escasa población y sus pobladores se consideraban míseros y desdichados, pues de sus tierras apenas percibían para el sustento diario.
Un trozo de tierra inculta sujeta al fuerte yugo del vasallaje: como desecho de la Orden de Santiago, que tenía potestad para ceder en usufructo, a cualquier caballero o maestre, la tierra de promisión de sus inmoderadas explotaciones.
“El justiciazgo” dependía de Caravaca, haciendo escala, previamente, en Ricote. “El Cabildo” no era representado por los vecinos, ya que “el alcaide o alférez” era nombrado por el capítulo de lo Orden: “El Almotacén” era elegido por Murcia y “el Regidor” por Caravaca. Ulea, en esta época, se encontraba encerrada y dominada, con desmedida ambición, desde diferentes frentes.
Los Reyes Católicos, con amenazas y mercedes, siguiendo su política centralista, consiguieron que los Maestrazgos de las Órdenes Militares, se incorporaran, de forma paulatina, a la Corona.
El Común de Ulea junto con Diego del Águila, representante de su Majestad Felipe II, en el año 1588, consigue recobrar para Ulea “el Villazgo” por haber contribuido con 700 ducados y 20 de sus mejores hombres para formar parte de la “Armada Invencible”.
Este privilegio lo obtuvo gracias al Gobernador de Villanueva de los Infantes, en el año 1609. A partir de aquí comenzó a resurgir el buen nombre de los uleanos, aunque muchos de ellos fueron expulsados en Diciembre de 1613. Más tarde regresaron, aunque mermados y comprobaron que sus propiedades fueron vendidas, en parte, a bajo precio y el resto confiscadas por Su Majestad.
D. Juan del Junco, secretario y tesorero del Santo Oficio de la Inquisición, adquiere gran parte de estas fincas aunque el mayor lote fue adquirido por D. Francisco Muñatones, jurado del Ayuntamiento de Murcia. D. Francisco al poco tiempo contrajo matrimonio con Dª María Luisa de Alcázar y de su unión nació Dª María Luisa de Muñatones y Alcázar. Con su nacimiento se inicia “el Mayorazgo de Campohermoso”.
Dª María Luisa contrae matrimonio con D. Sebastián de Rueda y Benavides. De esta forma se unen “el Mayorazgo y la Nobleza”, instaurándose en Ulea “Condado y Mayorazgo de Campohermoso”.
D. Sebastián de Rueda y Benavides y Almeida, hijo de D. Antonio de Rueda y Marín- “Regidor perpetuo de Murcia desde 1705 y Caballero de Santiago”- fue alcalde de Ulea desde 1690 y se granjeó la confianza de todos los uleanos: en adelante le llamaron “el Sr. de Ulea”.
Transcribo literalmente una Escritura otorgada por D. Sebastián de Rueda y cuyo texto dice así: D. Sebastián de Rueda solicitó y obtuvo del Obispado de Cartagena, a través del Consejo de Órdenes, el patronazgo de la Capilla Mayor de la Iglesia de San Bartolomé de Ulea, y su entierro en ella (folio 74), ordenando poner en ella su “escudo de armas”. Se obligó a pagar anualmente, el día de San Juan, 220 reales por el capital de 400 ducados que impuso por la venta de la “Rambla del Tinajón” y sobre ella dos tahúllas en esa huerta que no se podían vender y cuyos poseedores no han de estar obligados a presentar carta de pago, sino de los tres últimos años (folio 73), obligándose a mantener la Capilla Mayor con esmero, compostura y decencia necesaria….etc. Asimismo donó 400 ducados para reparaciones en dicha Capilla Mayor (folio 74).
La escritura se otorgó en Madrid el día 29 de Agosto de 1729, ante D. Francisco de Quevedo.
En virtud de esta obligación se deben conservar, cuidadosamente, “las Armas de Rueda” instaladas en la Capilla Mayor, y al servicio de asiento para el poseedor de las fincas y, por lo tanto, los 220 reales son una pequeña pensión remunerativa que no puede tomar el gobierno como si fuera simple censo. Además de esta pensión, el poseedor de estas fincas tiene la obligación de mantener la Capilla escrupulosamente cuidada- “Nota puesta en el libro de Pías Memorias de Ulea en Noviembre de 1865 (folios 4-75)”.
No se debe concluir la mención que se hace sobre las Armas de Rueda y el Señorío de Campohermoso, sin mencionar la unión de Villar de Felices y Campohermoso, situación que ocurre al contraer matrimonio D. Pablo Garnica y Sandoval (Conde Villar de Felices), con Dª María Paz Aguado y Fontes (Condesa de Campohermoso).