POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
¿Qué hubo con aquello de “Tres jueves hay en el año que relucen más que el sol: Jueves Santo, Corpus Christi y el Día de la Ascensión”. El Jueves Santo se conmemora la institución de la eucaristía, en la Última Cena, la transubstanciación del pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo; en el Corpus Christi, o solemnidad del cuerpo, también se celebra ese milagro eucarístico, y la Ascensión recuerda la subida de Cristo al Cielo, pero no en espíritu sino en carne y hueso, para sentarse a la derecha de Dios, no se sabe si hecho un Ecce Homo o el pálido que salió del sepulcro o cuando, en plena forma, caminó sobre el mar de Galilea. En tan importantes tres jueves (alguno se metamorfoseó en domingo), la Iglesia celebra la corporeidad de Jesús y nuestra resurrección al fin de los tiempos. Yo lo creo a pies juntos; más milagrosa es la vida, y no digamos la vida sin vino y sin amantes.
Fuente: http://www.lne.es/