POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)

Cuenta una tradición devota, colunguesa, que hacia 1630 una navegante veneciano, llamado Joseph del Misso, naufragó en las cercanías de la costa colunguesa, aproximadamente frente a los acantilados de Huerres. Dícese que este buen hombre, muy devoto de la Virgen Lauretana, prometió difundir su culto, si salía salvo y sano del trance, en aquella tierra que fuera su nuevo refugio y cuna.

Y así fue.

Cuéntase que su primer «morada» de descanso fue un ya viejo castaño existente en el lugar de Espina, cercano a la villa de Colunga, castaño que aún existe y que alberga, en su tronco partido, una imagen en piedra que es copia de la primitiva que diseño Joseph del Misso.

Joseph del Misso, servidor humilde en el Hospital de Peregrinos, cercano a la Iglesia de Santa Ana, promovió, con la ayuda de gentes influyentes en el Concejo, la fundación de una Cofradía en honor de la Virgen Lauretana y la creación de una Capilla que custodiara su imagen. Cofradía cuya existencia se remota al año de 1663 y cuya «vida religiosa», con altibajos de éxitos y fracasos, sigue en pujante realidad en los tiempos actuales.

La Virgen de Loreto, no es patrona del municipio colungues. Ese honor le corresponde a La Virgen Inmaculada y a San Cristóbal.

Otra cosa es que Colunga festeje la devoción a la Virgen de Loreto al igual que si fuera su patrona.

El culto lauretano colungués tiene su «fiesta mayor» el segundo domingo de julio y nueve días antes da comienzo el novenario que marca el inicio de las fiestas.

La imagen de la Virgen es llevada en procesión desde su ermita (la que fundó Misso) hasta la «Castañar de Espina», morada de «la Romanina», y desde aquí a la parroquial de San Cristóbal el Real. Los vecinos del barrio de Loreto se afanan prodigiosamente en adornar con flores y ramas (espadañas, hinojo, etc.) los caminos por donde discurre el cortejo procesional y los asistentes, mientras procesionan, rezan el Rosario, las letanías a María, la Salve, etc.

Es hoy nuestro primer recuerdo de la colunguesa Virgen de Loreto. En días sucesivos les iré desgranando historias que orlan la vida de esta Cofradía mariana.

Para todos, feliz comienzo de julio.