POR JOAQUÍN CARRILLO ESPINOSA, CRONISTA OFICIAL DE ULEA (MURCIA)
Han pasado los días de la Semana Santa y, en nuestra mente ha quedado el recuerdo de unas procesiones de gran belleza, colorido y recogimiento. Las hermandades del Cristo y de San Juan, con las vestimentas que les identifican, han arropado a las imágenes y a los sufridos costaleros qué, sobre sus hombros han cargado con el peso de las andas y las imágenes.
Sin embargo, a pesar de ser un pueblo pequeño, tras dichos pasos procesionales ha desfilado «una nutrida banda musical de tambores y cornetas» juveniles que durante varias semanas han ensayado con gran ilusión, con el fin de que no hubieran notas discordantes y que todo saliera como la ocasión requería.
La procesión de Jueves Santo, también llamada «procesión del Silencio», con el Cristo en la Cruz; así como las de Viernes Santo, con la Dolorosa, San Juan y el Cristo Yaciente, también llamada «La cama de Cristo», fueron acompañadas por el magistral sonido de los tambores y trompetas, dirigidos Javier España y José Manuel García Moreno.
Perfectamente ataviados y, totalmente sintonizados, han amenizado las procesiones en estas fechas de Semana Santa, por las estrechas y engalanadas calles de nuestro pueblo; efectuando el desfile procesional por el itinerario diseñado con anterioridad.
La Banda de cornetas y tambores, bajo la dirección de José Manuel y Javier, siguieron el recorrido procesional, tras el párroco José López Martínez y las autoridades municipales presididas por el Alcalde Víctor Manuel López Abenza.
Dicha banda musical estaba compuesta por más de una treintena de jóvenes, de ambos sexos, que han dado colorido y realce a las procesiones de Semana Santa de 2017. ¡¡Enhorabuena!!