POR FRANCISCO SALA ANIORTE, CRONISTA OFICIAL DE TORREVIEJA
Introducción
En estas extrañas ‘Fiestas de la Primavera’ en las que Murcia se viste de fiesta en las calles con el Bando de la Huerta, terminado el sábado con el ‘Entierro de la Sardina’ no quiero dejar de expresar desde aquí un homenaje a esa tierra con la que siempre hemos estado hermanados; y como mejor que con un bando huertano que Emilio ‘el de los Muebles’ dedicó a Torrevieja, allá por el año 1930.
Emilio Martínez López, Emilio el de los Muebles
Nació el 26 de noviembre de 1892 como el menor de tres hermanos. Hijo de comerciante, su tienda de muebles estuvo ubicada junto a la posada del Puente Viejo antes de 1917. Hombre en extremo sociable, se vinculó muy pronto a las fiestas de su barrio y a las de la ciudad. Comenzó a escribir y recitar en 1919. Asumió la presidencia de la comisión de fiestas de la parroquia de San Pedro en 1926 y, al año siguiente, ya estaba disertando en el Bando sobre las peleas de sus vecinos por el fútbol.
Nació el 26 de noviembre de 1892 como el menor de tres hermanos. Hijo de comerciante, su tienda de muebles estuvo ubicada junto a la posada del Puente Viejo antes de 1917. Hombre en extremo sociable, se vinculó muy pronto a las fiestas de su barrio y a las de la ciudad. Comenzó a escribir y recitar en 1919. Asumió la presidencia de la comisión de fiestas de la parroquia de San Pedro en 1926 y, al año siguiente, ya estaba disertando en el Bando sobre las peleas de sus vecinos por el fútbol.
Escribió la obra ‘Dende Murcia a la Arboleja’, que llegó a representarse en el teatro Romea, a beneficio de la reconstrucción del santuario de la Fuensanta. Su fácil compromiso social le llevó en 1929 a aceptar el cargo de ‘perráneo’ de La Arboleja y en 1930 era ya tan popular recitando los ingeniosos y cómicos bandos que salían de su pluma panocha que lo hizo incluso en la iglesia de San Antolín.
Su talento le permitió incluso escribir una pequeña pieza de teatro que, tres años después, los Amigos del Arte pusieron en escena. Era un juguete cómico escrito en panocho. Al año siguiente se volvió a representar su juguete cómico, pero en aquella ocasión, él mismo formaba parte del elenco de actores junto a Lolita Flores. Sacaba en el desfile carreta propia titulada Perráneo y desde ella desgranaba cada año su gracejo habitual en forma de inolvidables bandos, cuyos chascarrillos corrían de boca en boca durante días después.
En 1958 el Ayuntamiento le concedía el título de ‘Panochista de Honor’ y en 1959 el de ‘Perráneo Mayor del Bando’.
Actuó en el museo de la Huerta de Alcantarilla en 1967, junto al Orfeón Fernández Caballero, y en el mismo escenario recibiría un merecido homenaje en 1969 acompañado del panochista Pepe Ros y el cantante Ginés Torrano.
‘Panocha de Oro’ del Ayuntamiento de Murcia, fue además un asiduo de Radio Juventud, desde donde denunció, por supuesto en dialecto murciano, la destrucción de los baños árabes de la calle Madre de Dios. Fallecía en 1974.
Bando sobre el veraneo
Los lazos que siempre han unido y unen a Murcia y Torrevieja son numerosísimos basta recordar en estas páginas un pellizco de la historia, como es el bando huertano dedicado a Torrevieja, escrito en 1930 por el alcalde pedáneo de la Alboreja (Murcia), Emilio el de los Muebles, publicado en un folleto impreso en la tipografía de Carlos García, que estaba en la calle Gloria, número 32, de Murcia; y que dice así:
“BANDO qu´el Perráneo de la Alboleja ha mandado esclafar en la zaguera de su barraca pa que nengún avecinao alegue inorancia en estos dias de repreteras con motigo de las fiestas.
Prencipio:
Caballeros:
Soy el arcarde perráneo del partío e la Arboleja, lo mesmo que si dijiéramos el Surtan e toa la huerta.
Tuiquios con muncho antusiasmo pol ser cosa d´esta tierra, venemos de nuestra Murcia a enjaretar esta fiesta y dalle con mucho arbullo un abrazo con toa juerza al tío PACO TORREGROSA arcarde e Torrevieja, y ya cumplio este negocio, es dicir, esta fineza, saluár en nombre e Murcia y del rolde e mi huerta a toas las Torreviejeras que tien la SAL a espuertas.
Cuando dije en mi partío: ¡Zagales!, pa Torrevieja ponerus la ropa maja c´allí hay gente d´etriqueta. ¡Qué gurullo, maere mía, que s´armó allá en l´Alboreja!, tos relinchaban de gozo y más hinchaos que gufetas con antusiasmo y arbullo pol venir a güestra tierra, polque tenel entendío (y esto lo digo con juerza) que Torrevieja y la Murcia son dos pueblos que s´aprecian polque los dos siempre han sío jugo de una mesma breva.
Y abora, con el premiso quiero dente mi carreta desembuchar to el busili que trallo aquí en la mollera.
Prencipio:
Con motivo e la feria s´ha principiao a enjaretar munchos juevos de pelotas con tuiquia solemniá pa que puán arrejuntarse los de ajuera y del lugar y devertirse barato qu´esto es lo más prencipal.
El domingo habrá un partío de campionato final, ande tié que decubrirse el qu´haiga dao más patás, y lluego saldrá el perráneo con la madrina abrazá pa regalalle al más bestia una Jarra de metal. Abora, que sus prevengo que drento el festival dejeis quietas las pelotas to el que no sepa jubar…
A toas las avecinás y enquilinas d´esta tierra, prencipalmente a las mozas c´abora están casaéras, quiero dalles un consejo en las cercustancias estas pa qu´estén espabilaiquias cuando abajen a la feria.
Si s´acerca angún zagal a calentallos la oreja prenunciando esas cosiquias c´al cuerpo dan temblaera, cojellos con mucho tiento y sin decilles jelepa le soltáis un rempujón pa zambullirlo en la Ilesia, polque sigún estoy viendo la cosa se pone seria con los cafeses moernos qu´han fabricao en Torrevieja ande tocan el jas-blan y cantan las cupleteras. Los zagales en parvá se meten en francachela y salen mu escurríos y las Boas, no las mientan.
Con que ya sabeis zagalas, afijarse en la arvintencia y cantalle las verdaes si un zagaliquio s´acerca y no asperar a tontás asentás en güestra puerta, y si es que esfisais qu´el novio se regaza, y no aletea ni us mienta ná del casorio u está falluto de… perras soltalle cuatro patás y lo mandais a la… Arena.
Cuando abajeis a bañarse en la barraquiquia aquella qu´el tio Valentí el PATO tié en la punta de la feria, llevarse muncho cuidao c´aboa los zagales peras gastan unos tiliscopios pa esfisallo to de cerca, si anguna drento el agua s´emboba u s´hace la muerta, cuando arrempujan las olas los zagales s´aprovechan y el bañador hace pompa y us ven hista la… trastienda.
Con que fijarse, zagalas y si entráis en las casetas taparus mu bien las rajas y atrancar mucho las puertas pa desvitar desquivocos los días de repreteras, polque algunos zagaliquios suben la escalera a tientas y puén veros el vistio c´usó nuestra maere EVA.
Remate:
Cuando sintáis la trompeta que pitan pa subastar esos pescaiquios que sacan en el agua de la mar, llevarse muncho cuidiao, no comenzal a chillar, ni arrempujéis pa comprallos si anguno pensáis mercar, por qu´el tío de la subasta us va a sacar un quijal.
i>Quió hacelles una alvirtencia a los mozos del lugar pa cuando merquen pescaos que sea mujo, u calamar, atún, sardina, u bonito, u cualquier otro alimal. Pero cuidao con los PULPOS y la ALMEJA, no tocar, c´abora con el calor son cosas que sientan mal y dimpués, los risultaos s´apaña en el hespital.
HE DICHO
Güestro Perráneo
Emilio el de los Muebles/b>
Torrevieja, 15 de Agosto de 1930.”