POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
Funciona el boca a boca» suelen decir los malhablados; ayer lo repetía un presentador de telediario, y no se refería a la respiración boca a boca, que puede salvar una muerte por asfixia, trataba de contar cómo determinado producto se divulgaba en la conversación de la gente. Que corre «de boca en boca», es la expresión correcta, o bien, «funciona el boca-oreja», salvo que los besos de tornillo puedan llegar a ser algo más que una íntima demostración de amor, que al administrarse con lengüita y a rosca, se inculquen consejos, se transmita publicidad a salivacitos. Claro que, puestos a profundizar, quizá sea cierto lo del boca a boca: George Sand (Aurora Dupin) dijo que el beso es una forma de diálogo, y Alfred de Musset, en «Idylle», asegura que el beso es el idioma universal. A mí ya me llegaron varios escupitajos sobre la posible subida del IBI.
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