POR FRANCISCO PUCH JUÁREZ, CRONISTA OFICIAL DE VALDESIMONTE (SEGOVIA)
A veces me es un tanto difícil cómo iniciar un escrito, pues de su inicio puede dar idea de lo que vas a escribir y de la calidad de lo escrito, y no me gusta echar mano del tan manoseado “decíamos ayer”, o por supuesto lo que es mucho peor, echar mano del manido “estaba un servidor”, o “el que suscribe”, que no dejan de ser una egolatría sin mencionar el ego. En ocasiones con el título es bastante para ver por dónde van los tiros.
En este caso no pasa de ser más que un episodio vacacional, una tontería; cuando uno hace las maletas siempre hay algo que se le olvida y se da cuenta cuando llega a su destino, pero no por ello vas a meter media casa para pasar quince días.
Siempre me llevo el ordenador por si me da por escribir alguna tontería más de las que habitualmente escribo y tal resulta que cuando llegué a destino, eché en falta un enchufe adecuado, lo que vulgarmente se llama un “ladrón” para el ordenador
Me fui a una ferretería, única en el pueblo, “chinos” los hay a salto de mata, pero o no te entienden o no tienen lo que buscas ni cómo lo quieres; así que a la ferretería, que tienen de todo; sólo hay otro tipo de establecimiento que tenga tanta cantidad y de productos como una ferretería, la farmacia, con razón dice el dicho “hay de todo como en botica”.
Me acerco al mostrador y un solícito lugareño me atiende. ¿Qué desea señor?
Busco un ladrón. El hombre, con aire de mosqueo y una sonrisa irónica me dice: con la de ellos que hay y viene aquí a buscar uno. Difícil porque están todos de vacaciones.
Ya sé, le respondo, no me diga lo de que han cerrado el Congreso, el Senado las Asambleas de las diecisiete Españas y unos se han ido a Galicia, otros a Marbella, otros a Doñana, otros a Mallorca y algunos al extranjero, a Bruselas, a Panamá y sin ir más lejos a Andorra o Gibraltar.
Pero no dejan de cobrar del presupuesto me dice.
Le digo: lo que yo busco es un enchufe.
Peor me lo pone, me responde, ya no hay enchufes, están todos enchufados.
Y no digamos nada cuando se celebren las nuevas elecciones que se empeña el títere en convocar si no le ”botan”, digo votan.
¿Pero va a haber nuevas elecciones? ¿Y quién las va a convocar? ¿Y quién se va a presentar?, porque si es el mismo ya las ha perdido dos veces. ¿Lo intentará de nuevo?
Porque le va a pasar lo que a María Sarmiento.
Ante el cariz que iba tomando la conversación y para no prolongarla porque era el cuento de nunca acabar, me sacó unos cuántos enchufes y ladrones para que eligiera el que precisaba para mi ordenador.
Y viene a ocurrir que cuando no sabes cómo iniciar un escrito te sale un bodrio de artículo como el presente; pero, que no cunda el desánimo. Ello me dará pie para escribir uno más de mis SONETOS GROTESCOS, la España corrupta IV. Es un decir.