LOS CRONISTAS OFICIALES DE LA CIUDAD CONSIDERAN QUE EL ACUERDO SERÁ ESPECIALMENTE BENEFICIOSO PARA LA CAPITAL CACEREÑA

El hermanamiento de Cáceres y Lumbini sigue adelante y ya cuenta con el visto bueno de los grupos municipales. El asunto ha pasado esta mañana por la Comisión de Acción Comunitaria municipal y en la misma se han acordado los detalles del documento para que la capital cacereña y la ciudad nepalí sean municipios hermanos. Todos los grupos han votado a favor excepto el PP, que se ha abstenido. Ahora deberá llevarse a pleno.

El hermanamiento se basa en las relaciones iniciadas entre ambas urbes a raíz del proyecto del Gran Buda, que incluirá la estatua de Buda sentado más grande del mundo. Ello, según los técnicos del área de Turismo del Consistorio, supondrá un punto de interés para millones de personas no solo cuando el complejo esté montado sino también durante su construcción. «Será un estímulo directo del potencial crecimiento económico y social que nuestra ciudad podría tener, y que redundará en un aumento del turismo», remarcan. Al mismo tiempo se insiste en que «Cáceres será conocido mundialmente a través de este proyecto».

Se introducen algunos cambios sobre el memorando original ya que se tienen en cuenta las consideraciones establecidas por la Secretaría General en su informe jurídico así como la Asesoría Jurídica Internacional de la Subsecretaría de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, del Ministerio de Asuntos Exteriores.

Se han cambiado algunos apartados debido a los errores que contenían, ya que como se recordará, el memorando de entendimiento entre el Ayuntamiento de Cáceres y la ciudad nepalí de Lumbini se basaba en una ley madrileña sin competencias ni aplicación en Extremadura, la Ley 22/2006, de 4 de julio, de Capitalidad y de Régimen Especial de Madrid, a la que se mencionaba desde la segunda línea del documento que suscribió el día 10 de enero el alcalde, Luis Salaya, en su viaje institucional a Nepal.

También se atribuían competencias a una supuesta «Dirección General de Acción Internacional y Ciudadanía Global del Ayuntamiento de Cáceres» la acción de «coordinar el desarrollo del presente Memorando, propiciando el cumplimiento y la coordinación de las acciones previstas en el mismo…» . En este caso, las competencias pasan a ser para la Concejalía de Desarrollo Urbano.

El PP denunció en su día que se había llevado a cabo un ‘copia y pega’ del acuerdo que no llegó a prosperar entre Lumbini y Madrid, por lo que Cáceres se había limitado a transcribir aquel documento original. Ahora se introducen las correcciones y se toman en cuenta los informes según los cuales las áreas de Juventud, Cultura, Turismo o incluso los cronistas oficiales de la ciudad consideran que el acuerdo será especialmente beneficioso para la capital cacereña.

El PP se abstuvo en la comisión por lo que califica como «falta de transparencia» del equipo de Gobierno que preside Luis Salaya. «No estamos en contra del proyecto ni del hermanamiento pero echamos de menos una llamada del Gobierno para informarnos y conocer de primera mano qué se está haciendo y cómo», replica Rafael Mateos. El portavoz municipal pide explicaciones y reclama «más transparencia» sobre una cuestión que debe implicar a toda la ciudad.

Mateos también critica que se haya delegado en la Concejalía de Urbanismo este asunto y que, por contra, llegue a comisión con aportaciones de Cultura y Turismo y que las explicaciones las dé la concejala de Asuntos Sociales. María José Pulido aclaró en la comisión que el Gobierno está dispuesto a aportar toda la información necesaria pero recuerda que se trata de un proyecto que aún está en su punto de partida.

Fuente: https://www.hoy.es/ – MANUEL M. NÚÑEZ