POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
Con las cámaras de vigilancia urbana podríamos identificar al secuestrador que, a punta de pistola, abordó al taxista en la parada Alonso Quintanilla para ir a ninguna parte y robarle la cartera. Hoy, con los medios audiovisuales omnipresentes, la copia online del mundo nos permite hacer justicia. Pienso en esos guiones de ciencia ficción que nos permiten viajar en el tiempo y arreglar el pasado, paradojas aparte; sabemos que los sonidos, como las imágenes, vagan por el mundo, y algún día conseguiremos captar un discurso de Sócrates, visualizar a Jesucristo caminando sobre el mar de Galilea, e intervenir, cambiar la historia y crear mundos paralelos, alternativas a lo que fue. Pero, de momento, vayamos a los vídeos de Alonso Quintanilla, no echemos la imaginación a volar; a saber si las cámaras funcionaban ese día, si hubo cortes de luz, si tenían batería, si se grabó copia de seguridad…
Fuente: http://www.lne.es/