POR JOSÉ SALVADOR MURGUI. CRONISTA OFICIAL DE CASINOS (VALENCIA)
En el estudio Socio-Económico de la Comarca de Liria que se publica en el mes de enero del año 1968 entre otras cosas trata sobre el Medio Social, nos habla de la FAMILIA.
Casinos está constituido por 661 familias que están compuestas de la siguiente forma:
Número de hijos por familia: De 0 hijos, hay 227 familias que representan el 34,3 %. De 1 hijo, hay 138 familias que es el 20,8 %. De 2 hijos, hay 198 familias que son el 29,9 %. De 3 hijos, hay 68 familias que son 10,4 %. De 4 hijos, hay 15 familias que son en 2,4 %. De 5 hijos, hay 8 familias que son el 1,2 %. De 6 hijos, hay 4 familias que son el 0,6%. De 7 hijos, hay 2 familias que son el 0,3%. De 8 hijos, hay una familia que es el 0,1%. Total 661 familias.
Aunque parezca alarmante el número de familias sin hijos, refleja la realidad de la población actual, referida a solteros emancipados, viudos y «población vieja». En los datos anteriores solo se ha tenido en consideración los hijos que actualmente viven en el hogar paterno. Como se puede apreciar, la familia que predomina es la constituida por padres y dos hijos.
La mayor parte de los matrimonios, han tenido mayor número de hijos, pero estos, al estar casados o independizados, ya no forman parte del hogar. Además del matrimonio y los hijos, integran a veces la familia otros miembros: nietos, servicio doméstico, etc., siempre que estos sean menores de edad.
Número de miembros por familia:
De 1 miembro: 114 familias, total personas: 114. De 2 miembros: 144 familias, total personas 228 personas. De 3 miembros: 135 familias, total: personas 405. De 4 miembros: 155 familias, total personas: 620. De 5 miembros: 81 familias, total personas: 405. De 6 miembros: 21 familias, total personas: 126. De 7 miembros: 7 familias, total personas: 49. De 8 miembros: 2 familias, total personas: 16. De 9 miembros: 1 familia, total personas: 9. De 10 miembros: 1 familia, total personas: 10. Total 661 familias y 2.042 habitantes.
Lógicamente la frecuencia más elevada es la correspondiente a cuatro miembros por familia, es decir el matrimonio y dos hijos.
En cuanto a la alimentación familiar, en la mayoría de las familias suele estar formado por el desayuno, almuerzo, merienda y cena. El desayuno y la merienda en más frecuente en los niños que en los mayores. El almuerzo consta de un «entrepan» de fiambres, carne o huevos. En la comida se toma el primer plato de caliente a base de arroz, pastas, y luego fiambre y frutas. Es costumbre los domingos hacer paella valenciana y tomar dulces en el postre. La vista más común es el vino, casi todas las familias lo tienen propio. Algunos toman cerveza.
Casinos, como todo pueblo agrícola y trabajador hace de los domingos el día de descanso. Hombres y mujeres lucen en estos días sus mejores vestidos, salen al café, a pasear por la carretera donde más movimiento hay. Durante la semana llevan puestas las ropas del trabajo. En esto se diferencia bastante de las ciudades o pueblos con mayor número de habitantes. La gente joven está al día.
Para conocer el nivel de vida de las familias y la forma que distribuyen sus gastos es preciso realizar encuestas de tipo muestral, sobre un conjunto más o menos numeroso de familias.
Esta parte del estudio, nos demuestra el «como éramos y cómo vivíamos». También deja claro en parte «como nos miraban». Quizás al expresar la opinión, de nuestra forma de vestir, reflejaron en aquel momento la imagen que pudieran dar las personas, pues hablaba el estudio de que los domingos «hombres y mujeres lucen en estos días sus mejores vestidos.»
La gente en Casinos, siempre ha vestido bien; sobre ser un pueblo que faltaba el agua, los médicos que han atendido a las personas de Casinos por motivos de enfermedad, han alabado su higiene; su gentileza al presentar los productos típicos como peladillas, vino y aceite como signo de agradecimiento por las atenciones recibidas. Por otra parte, aquellos años, había modistas a domicilio, es decir la ropa se hacía en casa, había mucho nivel en la confección y arreglos de ropa. No vestíamos pasados de moda, estrenábamos ropa y zapatillas a pascua, en fiestas Siempre hemos sido un pueblo además de joven, dinámico y con gusto para vestir.
Otro detalle frecuente, era cuando se producía el fallecimiento de algún familiar había costumbre de teñir en casa la ropa para guardar el luto. Las prendas de diferentes colores se volvían negras. Yo he vivido ese momento de comprar tintes «Iberia» en las droguerías de Rafael o Enriqueta, para en calderas llenas de agua hirviendo cambiar el color de la ropa.
Acabo ensalzando a la mujer de Casinos, valiente, trabajadora, de barrer y regar las calles llenas de tierra y de polvo al no estar asfaltadas, de tener las casas aseadas, de ser exquisitas cocineras: ya hemos visto que la paella era el plato de cada domingo, no había necesidad de ir a restaurantes, la mejor paella se cocinaba en casa. Mujeres que sabían de todas las labores del campo, mujeres que han sido y son excelentes madres de familia, mujeres que han sabido darnos lo mejor de ellas, educando a sus hijos, desviviéndose por que tuviéramos un futuro mejor, en definitiva, las mujeres que han sabido desde siempre no dar, sino ser la gloria de Casinos.
Del ayer al mañana de Casinos, hay una larga historia escrita, pensada o hilvanada, que han tejido con retales de honor, hilos de amor, gotas de paciencia, sentido del humor, experiencia acertada, laboriosidad consumada y sobre todo con exquisito criterio, las mujeres que han vivido desde siempre en la aldea, en la villa, o en el nuevo pueblo, que ha visto formarse y crecer todas las generaciones que han conformado y conforman la historia de Casinos.