LO AVISAMOS. LO AVISÓ TAMBIÉN EL CRONISTA OFICIAL DE TELDE, ANTONIO MARÍA GONZÁLEZ PADRÓN. Y LO AVISARON LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN QUE NO COBRAN DEL GOBIERNO MUNICIPAL. Y LOS PEORES PRESAGIOS SE CUMPLIERON
Se consumó el atentado contra el patrimonio histórico artístico de Telde. La plaza y basílica de San Juan sucumbieron ante la zafiedad y el «bochinchismo» que parece ser la nota dominante en la concejalía de Festejos, y por extensión, en el actual gobierno municipal de Telde.
Voces autorizadas y medios de comunicación, entre los que se cuentan el Cronista Oficial de la Ciudad de Telde, don Antonio María González Padrón, advirtieron que la celebración de la práctica totalidad de actos del carnaval en el delicado entorno histórico de San Juan traería graves e irremediables consecuencias sobre este emblemático espacio urbano.
Dicho y hecho. La misma mañana siguiente a la celebración de la zafia parranda los daños al pavimento de la plaza eran claramente visibles. Baldosas rotas y sucias, cubiertas de grasa y deposiciones humanas… por no mencionar los daños estructurales que, con toda probabilidad, las altas vibraciones de la potente megafonía instalada habrán causado a la centenaria basílica de San Juan.
Sin importarle lo más mínimo el rigor por nuestro pasado y el cuidado del patrimonio histórico que es de todos, las cabezas pensantes de este gobierno (es un decir) municipal, corrieron a tratar de malamente disimular, parchear, los daños irreparables causados a la Plaza.
En la foto que ilustra esta información puede verse cómo se ha reemplazado una baldosa rota por otra que no coincide, ni en diseño ni en color con las demás.
Un pastiche, un mal remiendo que no sólo no arregla el problema, sino que lo aumenta poniendo en evidencia el desconocimiento y desprecio absoluto de los responsables municipales sobre al patrimonio histórico artístico de esta Ciudad.
Fuente: http://www.teldenoticias.com/