POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Así, así decían «los mayores» (padres, tíos, abuelos…) cuando algún familiar, allegado o amigo tenía éxito en alguna gestión o proyecto, había conseguido algo en su vida, gozaba de un suceso familiar muy íntimo…
Es verdad. Para un niño todo estreno, y más si son zapatos, es signo de triunfo y de alegría.
No. No me pregunten la causa que relaciona los ZAPATOS NUEVOS con el éxito porque no la sé. Pero su razón tendrá.
Pues hoy, en estos momentos, señoras y señores, amigos todos… EL QUE ESTÁ CON ZAPATOS NUEVOS ¡SOY YO!
¿Y por qué?
Pues porque acabo de recibir, recién salidos de imprenta, varios ejemplares del último libro que escribimos el catedrático DON ´MANUEL RAMÓN FERNÁNDEZ PÉREZ y yo con destino al SEGUNDO CURSO DE ESO. Su título FÍSICA Y QUÍMICA 2º ESO. PROYECTO TESLA.
Lo edita PARANINFO, S.A, editorial englobada en la asturiana EDICIONES NOBEL S.A.
Un libro-texto de estudio, pleno de colorido, de actividades, de sugerencias, de información científica, de «temas para discutir» y para disfrutar. Lo hemos escrito con el convencimiento de que SABER FÍSICA es, sencillamente, ABRIR LOS OJOS, OBSERVAR y EXPRESAR CON NÚMEROS lo observado.
¡CON NÚMEROS, SÍ SEÑOR! Y lo decimos en estos momentos en los que hay quienes piensan que «lo de las cuentas» es cosa del pasado.
¡Ah! Y de paso la FÍSICA es también «ciencia de progreso y de ayuda al bienestar (sanitario, social, económico…) de un país.
¡Eureka!, exclamó Arquímides cuando logró interpretar y aplicar un fenómeno físico, consecuencia del Principio de Impenetrabilidad.
¡Esto es lo más increíble que me ha sucedido en la vida!, dijo Rutherford cuando observó que algunas partículas alfa (núcleos de helio) rebotaban al ser lanzadas contra una finísima lámina de oro.
Pues así me encuentro yo en estos momentos. Gritando ¡EUREKA! como Arquímedes y reconociendo como INCREIBLE el hecho de que este libro amplíe la lista de los más de 200 que llevo publicados.
Pasan y pesan los años. La ilusión y alegría -por no decir el orgullo- de ver publicado un libro más es indescriptible.
Gracias, muchas gracias, por «escuchar mi confesión». Es un desahogo de mi conciencia y una muestra de gratitud a quienes en su día me enseñaron «a ser persona con ideales».