POR RICARDO GUERRA SANCHO, CRONISTA OFICIAL DE ARÉVALO (ÁVILA)
Como cada dos años, cofradías y hermandades se reúnen en torno a Nuestra Señora de las Angustias. Es este un congreso que nació en la ciudad de Úbeda, tímidamente, como una reunión de algunas cofradías y hermandades con la misma titular y advocación, casi un grupo de nuevos amigos que nos reunimos para conocernos y compartir esta devoción mariana tan extendida y venerada por todos los puntos de nuestra geografía.
Tras Úbeda llegó Murcia, el congreso de la consolidación y ordenamiento estatutario, en el año de Salcillo que es el magnífico escultor autor de la imagen de aquella ciudad huertana. La siguiente cita fue en Cuenca, otra ciudad emblemática, que representó la eclosión y confirmación de estas citas de devoción mariana, ciudad colgante y encantada… también de recibirnos. Con el congreso de Estepa, ciudad sevillana de aromas mantecados y arte, se confirmó que cualquier pequeña ciudad puede acoger a esta familia cofrade, solo depende del amor con el que se haga. Y llegó la última cita, en Toledo, la ciudad imperial, que ha consolidado esta costumbre ya establecida, ese compartir ideas y experiencias, de gozar con históricas liturgias mozárabes nuevas para muchos de nosotros, de compaginar cuestas y calles tortuosas que desembocan en iglesias o basílicas sorprendentes, herederas de romanos, visigodos, árabes, mozárabes, mudéjares y cristianos, en unas manifestaciones arquitectónicas tan variadas como espectaculares. La Imperial Toledo, ciudad siempre atractiva y sugerente que despierta sensibilidades artísticas, emociones y vivencias espirituales.
Citas que han consolidado ese contacto entre cofrades, aquí más de doscientos, hermanos en la fe, que han propiciado el compartir de experiencias cofrades, formas organizativas, y vivencias de religiosidad popular.
En el impresionante marco de la antigua sinagoga de Santa María la Blanca nos recibieron los cofrades toledanos con entusiasmo y el Arzobispo D. Braulio Rodríguez −el mismo que abrió el cincuentenario de la Coronación Canónicas de nuestra imagen de Arévalo, cuando lo era de Valladolid−, que inauguró el V Congreso. Poco después, autoridades de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, en el palacio de Fuensalida, recibieron a los hermanos mayores de las 35 hermandades y cofradías que nos dimos cita.
El segundo día, las ponencias sobre temas marianos de las angustias de la Virgen y su iconografía en El Greco. Recepción del Alcalde toledano a las cofradías y hermandades. En la asamblea fue aceptada por aclamación la candidatura para el próximo congreso, que se celebrará en Zamora en 2015. Y los actos que completaron el congreso, visitas turísticas, el extraordinario concierto, la misa mozárabe, la solemne de la catedral, la procesión de Las Angustias desde la Santa Iglesia Catedral Primada hasta su Parroquia Mozárabe de las Santas Justa y Rufina, su sede, emoción y belleza por las calles toledanas, llenas de gentes que miraban tantos distintivos cofrades.
Congreso en torno al cual también se hace amistad y nace la unión… las cofradías históricas y las nuevas, todas unidas en torno a Nuestra Señora, la Virgen de las Angustias de España.