POR MANUEL GONZÁLEZ RAMÍREZ, CRONISTA OFICIAL DE ZACATECAS (MÉXICO)
Hoy les comparto una obra del Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba, ubicado en La Habana, ciudad hermana de Zacatecas.
Es un lienzo de Leopoldo Romañach Guillén, titulado “La chica de las cañas”, 1925. Realizado hace casi un siglo.
Durante unas vacaciones en Corralillo, Leopoldo Romañach fue sorprendido por una niña mulata que jugaba entre las cañas. La niña tenía unos diez años y su nombre era Balbina Cairo. El artista tuvo que pedir permiso a su madre para hacer dos bocetos de su imagen, uno se perdió y el otro se usó para hacer este retrato. El trabajo es un primer plano de una joven morena posando sosteniendo unas bastones de azúcar mientras nos mira. Con esta pintura, Romañach se acercó a las humildes clases que trabajaron en la producción de azúcar en la isla.
El tema de las cañas nos recuerda uno de los primeros cultivos traídos a las Américas por los españoles, principalmente andaluces, de sus campos en las Islas Canarias, y los portugueses de sus campos en las Islas Madeira.
El azúcar fue traído a estas tierras por los españoles. Un ingrediente esencial en nuestra dieta y gastronomía. Por ejemplo, se utiliza en uno de los platillos emblemáticos de #Zacatecas: el asado de boda.
Asimismo, la caña de azúcar es uno de los ingredientes indispensables para el tradicional ponche caliente que se consume en esta época invernal. También se consume cruda, pelada, en trocitos o a mordidas. Se mastica para extraerle el jugo y luego se tira el bagazo.
Hace años atrás, un trozo de caña de azúcar venía incluido en los bolos navideños.
FUENTE: https://www.facebook.com/maguito.96