POR JOSÉ RAIMUNDO NÚÑEZ-VARELA Y LENDOIRO, CRONISTA OFICIAL DE LA CIUDAD DE BETANZOS (LA CORUÑA)
Según hemos documentado en nuestra obra » La Ocupación de Betanzos y su Tierra por los Franceses en 1809 «, editada por el Excmo. Ayuntamiento y GADIS en el año 2013, los franceses instalaron una parte de sus tropas y caballería en la iglesia y monasterio de Santo Domingo de esta ciudad, con el consiguiente destrozo de la mayor parte de sus retablos y numerosas imágenes talladas en madera, que eran utilizadas por los invasores en combustión para hacer el rancho y calentarse al fuego, además de la destrucción de buena parte del enlosado y sepulturas, a partir de su entrada el 11 de enero de 1809.
Una de las que más padecieron el embate de los gabachos fue la Capilla del Santo Cristo y de las Ánimas del Purgatorio, e imagen de Jesucristo crucificado que se salvó por llevarla el cofrade José Bugallo para su casa, y calle del Caño de la Fuente de Unta, donde habitaba este Sargento retirado (Opus cit., pág., 117). El resto del retablo sufrió la destrucción de varias esculturas e imágenes, y quedó al igual que la capilla negro y ahumado por el fuego. Por su parte la comunidad de frailes dominicos se disgregó y refugió, al igual que lo efectuaron los ciudadanos, en las aldeas más retiradas y menos accesibles o remotas de la Jurisdicción Real de Betanzos y su Tierra de las Mariñas, hasta el 23 de junio de 1809 con motivo de su retirada del Reino de Galicia.
La recuperación de la por entonces capital de provincia se prolongaría durante varias décadas, y con el retorno de los religiosos de la Orden de Santo Domingo se promueve la recuperación de las congregaciones religiosas establecidas en su iglesia, tal y como lo efectuaba dicha Cofradía de Ánimas con el otorgamiento de una escritura, el 8 de junio de 1816, de » Conbenio Sre hacer las Ymagenes qe se refiere qe otorgaron Domº. Garcia, Simón Francº Ramos, con Dn Tomas Ganbino», redactada del tenor siguiente:
«Enla Ciudad de Betanzos a ocho dias del mes de Junio año de mil ochozºs. diez y seis ante mi essnº y testigos parecieron presentes dela una parte Domingo Garcia y Simon Francº. Ramos aquel Apoderado y este Fiscal y facultados por los Yndibiduos dela cofradia de Animas erijida enla Yglesia del Conbento de Santo Domingo desta dha Ciudad donde son Vecinos, para lo que se expresará, Cuia facultad le confirieron por Cabildo celebrado enlos seis de E[n]hero de este año, y de la otra Dn Tomas Ganbino Maestro Maior del Arsenal dela Villa del Ferrol donde hes Vecino y dijeron los dos primeros que por el referido Cabildo de que dio fee el preste essnº. seles encargó por dhos yndibiduos dela indicada Cofradia el tratar lo conbeniente en razon de construirse las Ymagenes de San Miguel, y la del Santo Angel dela Guarda para colocar enel Altar de Animas qe con otras habian destruhido y quemado las tropas Francesas a su entrada y estancia en esta Ciudad, cuio costo se satisficiese por los Mayordomos Electos como resulta de dho Cabildo a que se remiten: Que a consequencia de ello trataron con el Dn. Tomas Ganbino como Maestro en semejante oficio de Escultor y que ha hecho tambien conprefeccion la Ymagen de la purisima Concepcion, qe sele encargó Mereciendo la aprobación dela obra; a fin de que lo hiciese tambien de las de que ba hecho Mencion necesita el Altar de Animas, de que son cofrades y en efecto se ajustaron por la cantidad de Mil y Trescientos Reales pues aunque les pidió Mil y quinientos que contenpló Merecer por su trabajo rebajó los Doscientos a ruegos que le hicieron, en cuia cantidad el Dn. Tomas Ganbino Se obliga a hacer de nuebo con toda prefeccion, la Ymagen de San Miguel con su piana de Cinco quartas de Alto, sus Alas Espada, Figura de bajo de sus pies y lo demas necesario quese requiere; La del Santo Angel dela Guarda de la misma altura con su Niño y mas prefecciones regulares una y otra sin pintar, las que presentará ra (sic) dentro de quatro Meses enbiandolas a esta Ciud. Cuio porte ha de ser por qta. de dha cofradia: Y la cantidad delos Mil y trescientos rrs. los ha de satisfacer esta, en dos plazos el primero pª. Ultimos de este mes, y el segundo concluidos los quatro quando entregue las Ymagenes: En cuia conformidad hacen este Trato y conbenio, pr el que los tres otorgtes. se obligan los Garcia y Ramos a nre de dha cofradia como tal facultados con sus pnªs. (personas) y vies. (bienes) de cumprirlo (sic) y de estar y pasar pr. su tenor y Capitulado en esta essriª. (escritura) So pena de qe a ello seles apremie por todo Rigor de Justª.(Justicia) y pagar las costas y gastos que cerca de ello se causaren. Y para Cunplimtº. de ello confirieron poder a las Justicias Seglares de S.M. de su fuero y Jurisºn. Con renunciacion delas leyes de su favor y la General que las prohibe en forma. Asi lo Dijeron otorgan y firman Siendo testºs. prestess. Dn Antonio Tomé, D. Manuel Gomez Vecinos de esta Ciud., y Andres Cachaza qe lo hes de San Martin de Brabio delo qual y conocimtº. delos otorgantes yo el Escribano doy fee.[Firmado]. Domingo Garcia, Simon Francº Ramos, Thomas Gambino.[Rúbricas]. Ante mi.[Firmado]. Benito Manuel Garcia Perez.[Rúbrica].«. (Archivo Notarial de la Coruña. Protocolo 2.805, folio 31, del escribano Benito Manuel García Pérez del número y ayuntamiento de Betanzos).
El documento antecedente aparece citado por don José Couselo Bouzas, en su obra Galicia Artística, editada en Santiago en 1933, página 370, y del que ofrece un reducido comentario, por cuya razón hemos considerado oportuno publicarla íntegramente para conocimiento general y con el aporte del registro notarial que le ha sido asignado posteriormente. Y así se logró que dos obras del prestigioso maestro escultor don Tomás Gambino, engrosaran el patrimonio artístico de la iglesia de Santo Domingo de Betanzos, merced al buen hacer y empeño de la extinguida Cofradía de las Ánimas del Purgatorio.
La imagen de San Miguel, según el convenio anterior debería contar con una altura de cinco cuartas (La cuarta, medida de Betanzos, era igual a 0,2090 metros, por lo tanto mide 1, 393 metros), está situada al lado derecho del primer cuerpo del retablo y hornacina del intercolumnario, tallada en madera con ornamentación de reminiscencia rococó, presenta al Árcangel en plena lucha con Satanás antropoformo, empuñando una lanza con su mano derecha, con la punta situada sobre su faciana en determinante postura vencedora, y en la mano izquierda sostiene el escudo, inclinado en igual dirección, como parte de su vestimenta militar. En el frontis del escudo aparecen las iniciales D.O., pintadas en lugar del lema Q.S.D., » Quis sicut Deus «, que figura en el del gremio de Mareantes de la iglesia de Santa María del Azogue, tampoco coincide con el utilizado por su padre, el maestro escultor don José Gambino, quien en tal caso lo hizo con Q.C.D.,» Quien como Dios», lo que claramente demuestra que no forma parte de la obra del maestro y que fueron situadas por otra mano con posterioridad. En la hornacina del costado izquierdo del mismo nivel, se encuentra la imagen del Ángel de la Guarda con idénticas dimensiones, en actitud de proteger al infante de todo mal con su mano derecha, con la izquierda levantada y el dedo dirigido al cielo, hacia donde el niño orante fija su mirada.
En cuánto a la citada imagen de Nuestra Señora de la Concepción, estaba situada en el Altar Mayor de la iglesia conventual de San Francisco, según convenio de la Cofradía con la comunidad franciscana del 29 de septiembre de 1669 (Vid. la entrada de esta web » Traslado de la Purísima para el altar Mayor de San Francisco«, del 8-XII-2012), y sucumbió en el incendio general de esta iglesia y convento el miércoles 22 de julio de 1936, a manos de una turba de exaltados del Frente Popular, alimentado con dos bidones de gasolina para garantizar el éxito de la operación, servidos por don Anselmo Blanco en el surtidor de Industrias Núñez, como empleado y encargado del mismo, situado al arrimo del parque municipal, mediante un vale de entrega institucional, según indubitada fuente familiar ( Remitimos a nuestro artículo » Cien años de la historia de un monasterio«, La Voz de Galicia 15-VIII-1967, págs., 36 y 37, consultable en esta web).
Este retablo al igual que el inmediato de Nuestra Señora del Rosario, sería pintado seguidamente por el maestro don Bernabé Prieto Solís, natural de Pontedeume y domiciliado en Betanzos en la calle de Arriba de la Pescadería o de la Ribera, y más tarde por el pintor don Francisco Atienza, en el año 1850, según hemos dado a conocer en la anterior entrada.