POR ANTONIO BOTÍAS SAUS, CRONISTA OFICIAL DE MURCIA

Cristina Murcia se informa por ‘La Verdad’, allá en Renania del Norte por donde anda, de cuanto sucede en la tierra de su mismo apellido. Pero eso, aunque evidencia un gran cariño por su Región, es solo un dato anecdótico en su destacado curriculum. Porque Cristina estudió Química en la Universidad de Murcia y luego fue Erasmus en la de Bonn (Alemania), donde descubrieron su potencial y le ofrecieron cursar su doctorado sobre la química de las moléculas con fósforo y oxígeno. Casi nada. Además, es vicepresidenta de la Asociación de Científicos Españoles en Alemania en la región de Renania del Norte.

-¿Cuáles son los objetivos de la Sociedad de Científicos Españoles en la República Federal de Alemania?

-Trabajamos para concienciar a la sociedad de la importancia del I+D y la economía del conocimiento para el desarrollo. También facilitamos colaboraciones entre instituciones y empresas españolas y alemanas y, lo que es más importante, acercamos la ciencia a todos los públicos.

-En los últimos tiempos ha crecido el número de murcianos que han emigrado a Alemania para desempeñar diversos trabajos. ¿Sucede lo mismo con los científicos?

-No tengo datos exactos, pero le puedo decir que en mi grupo de investigación somos dos, así que estamos casi como en casa. Tengo varios conocidos químicos por la UMU que están en Hanover y en Berlín.

-¿Cómo llegó usted allí?

-Con una beca Erasmus. Y la aproveché bien porque, aparte de asistir a las clases, realicé unas prácticas con el profesor R. Streubel que me sirvieron para hacer un máster. Después me ofreció hacer el doctorado, que terminaré este año.

-Su doctorado es sobre química de moléculas con fósforo y oxígeno, ¿qué aplicaciones prácticas tiene?

-La química que realizo es fundamental. Ésto significa que me dedico a hacer moléculas nuevas y a estudiar sus propiedades físicas y químicas, es decir, a saber cómo se comportan en distintos entornos. Una vez que se conozcan estas propiedades, entonces se empieza a estudiar si estas moléculas podrían tener alguna aplicación en la industria o la medicina. Pero para esto hace falta mucha inversión y muchos estudiantes de doctorado.

-Cuando se doctore, ¿qué le gustaría hacer?

-Seguir en la ciencia, sobretodo en divulgación. Gracias a Cerfa he tenido la oportunidad de acercar el trabajo de un científico a la gente y es muy gratificante. Hasta ahora hemos organizado talleres de ciencia para niños y nuestros simposios anuales. El del año pasado, ‘ConCienciArte’, lo dedicamos a las relaciones entre la ciencia y el arte. Este año lo dedicaremos a las mujeres científicas. Será el 20 de junio en la Universidad de Düsseldorf bajo el título ‘Women in Science’ y contaremos con la presencia de grandes investigadoras.

-¿Echa de menos algo de Murcia?

-Por supuesto, a mi familia y amigos. Y naturalmente tengo siempre en mi mente el ambiente que tienen las calles de Murcia y que crean los murcianos. El murmullo de gente que se escucha al pasar por cada plaza y los entrañables olores de nuestra gastronomía. ¡Ay lo que daría yo ahora por un pastelico de carne!

-¿Qué le gusta más de Alemania?

-La ciudad donde vivo y sus gentes. Bonn, a orillas del Rin, es un lugar amable y abierto en el que nunca me he sentido extranjera. Aquí están las sedes de las Naciones Unidas, la Deutsche Telekom y DHL, somos muchos extranjeros.

Fuente: http://www.laverdad.es/