CRÓNICA-CONSUELO
POR AGUSTÍN DE LAS HERAS MARTÍNEZ, CRONISTA OFICIAL DE VALDEPIELAGOS (MADRID)
La España se vacía en nuestra España vaciada. Pero también en nuestro paisaje, en nuestras calles, en nuestras estampas.
El tiempo es inoxerable y la muerte es cruel con la vida.
Y pasear por esas calles, como las de Brazacorta, se traduce en un penar de no querer olvidar.
Y me niego a olvidar.
El Pilde cursa sus aguas por donde siempre, la torre de la iglesia vence la vertical de los años pero, las campanas… las campanas tañen a duelo. Y su sonido es muy repetitivo en los últimos meses. Y quienes dieron voz a esas calles, presencia a un pueblo, nos dejan solos, muy solos.
Harto estoy de despedidas. Porque no quiero que se vaya nadie. Porque cada nadie es un alguien que me importa.
Y dicen que la España se vacía ¡Y nuestras almas!
Sí Olga, como me decías esta tarde, al menos tu madre, Consuelo, se ha reunido con tu padre. Y con tantos aquellos que dieron vida a un paisaje.
Recordémosles siempre. Y no dejemos que mueran en nuestro olvido.
Pero por favor Átropos, pierde por un tiempo tus tijeras y que ninguna moira se acerque en mucho tiempo a ese pueblo que adoro, que es Brazacorta.
Porque lo siento.
Os acompaño en el sentimiento Olga, a tus hermanos y a tu familia.
