CRÓNICA DE ZACATECAS : COMIDA AL ESTILO REVOLUCIONARIO
POR MANUEL GONZÁLEZ RAMÍREZ, CRONISTA DE ZACATECAS (MÉXICO).
Con el permiso de sus mercedes, hoy se me antojó comer al estilo revolucionario, en la víspera del aniversario del inicio del movimiento armado de 1910.
Con la Revolución Mexicana, la comida se tuvo que hacer portable pues la gente se trasladaba con más frecuencia de lo habitual y aquí también nace la popularidad de las tortas que facilitaban el trabajo de las Adelitas.
Según Alberto Peralta de Legarreta, doctor en Historia por la Escuela Nacional de Antropología e Historia, autor de < La mesa de todos, historia de la gastronomía callejera en la Ciudad de México >, los TACOS y las TORTAS surgen o se afianzan en el gusto popular en la era revolucionaria, justamente por su portabilidad.
El doctor José Eduardo Vidaurri Aréchiga, Historiador y Cronista de la Ciudad de Guanajuato platica que la gente de bajos recursos de la zona centro, durante la Revolución Mexicana, se alimentaba de la gran trilogía mexicana: maíz, frijol y chile.
Hay otros platillos que tienen que adaptarse a estas épocas de la guerra, en las que las Adelitas son responsables de cocinar para los involucrados en la revolución, que van a poner los fogones donde preparaban GORDITAS que iban rellenas de lo que hubiera o se pudiera.
Justo hoy me surtí de una riquísimas gorditas de migas y que en mi pueblo natal también se les conoce como gorditas de unto. Son gorditas que van rellenas de migajas de chicharrón de puerco o de las carnitas.
Las conseguí en Carnitas La Piedad, donde las prepararon al momento que llegué por ellas. La señora que las hace, toma un pedazo de masa de maíz, le da una forma redonda y luego en medio le coloca una buena cucharada de las mencionadas migajas (que dicho sea de paso, son de calidad) que luego cubre con la misma masa. Enseguida, las echa a freír, las saca y las escurre. Y quedan listas para degustar.
En la Revolución no cualquiera se podía dar el lujo de comer productos cárnicos, sin embargo, las “basuritas” o migajas del chicharrón eran muy baratas.
Así que mi comida de hoy fueron gorditas de migas, acompañadas de pico de gallo (con los ingredientes que llevan los tres colores de la bandera de México: el verde del chile serrano y del cilantro, el blanco de la cebolla y el rojo del jitomate). No podía faltar un rico aguacate y una canelita caliente. Buen provecho…
P. D. Además de riquísima, la comida de hoy me costó 30 pesos. Cada gordita costaba 10 pesos, precio promocional.
