POR AGUSTÍN DE LAS HERAS MARTÍNEZ, CRONISTA OFICIAL DE VALDEPIELAGOS (MADRID)
Demostrado queda que Valdepiélagos ha dado ilustres personajes aunque no hubieran nacido en la villa. Y la genética ha fluido generación tras generación aunque la distancia haya alejado a los progenitores.
Esta mañana, el azul del cielo de los cuadros de Velázquez era sin duda más vivo. Y El Pardo era un lugar más luminoso que el existente en las pinturas de El Prado.
A Luís Maria le había visto por última vez en una playa de Calpe este verano. Bueno, él me vio a mi. Yo sólo percibí que me miraba alguien desde donde mi vista ya no era efectiva y que en el móvil le enseñaba a su mujer una foto que parecía mi imagen. Ella dijo que no era yo y al yo comentarle a la mía que me parecía haberme visto en un móvil lejano, mi cónyuge también lo negó. Un whatsapp envié a mi conocido amigo diciéndole que si estaba en Calpe a lo que afirmó diciendo que eramos los dos los que no nos habíamos conocido.
Hoy él vestía traje de época junto a los componentes de la Peña Castiza El Madroño, la Cofradía de San Eugenio de El Pardo, la Asociación de Madrileños y amigos Los Castizos, El Orgullo de Madrid, Magerit Dulzaina Viva y la Asociación vecinal de El Pardo.
Luis Maria es un escritor e investigador nato de la historia de la villa, especializado en lo que ha acontecido en ese subsuelo que conforma el metro, en sus sucesos y sus memorias, hasta incluso llegar a los fantasmas de estaciones olvidadas como la de Chamberí.
Este domingo 17 de noviembre se celebraba la Romería de San Eugenio de El Pardo y en el templete del parque de la Mar Océana, Luis Maria ha sido pregonero. Y lo ha sido por su cultura, por su investigación, por su amor al pasado de la Villa y digo yo, como merecedor de ser en un futuro cercano, cronista de la villa de Madrid. Que nadie me lo niegue.
¿Y qué hacia el cronista de Valdepiélagos y presidente de la Asociacion de Cronistas Madrileños ACROMA en El Pardo? Pues lo primero acompañar a un amigo que iba a ser pregonero y lo segundo dar fe de un ilustrísimo hijo de ilustre valdepielagueño.
Luis Maria Gonzalez Valdeavero, aun nacido en Valdetorres, es el hijo de Buenaventura Antonino González Chicharro, nieto de Manuel y María Esperanza, primo de Manolo Gónzalez, el padre de Manoli González de Valdepiélagos y pescador en nuestro belén viviente.
Y de lo oído hemos aprendido que esos montes, a comienzos del siglo XVII, estaban vedados para uso exclusivo de la corte. Y que un día un noble a caballo encontró una persona que recogía bellotas del suelo que alegó era para su sustento. Impresionado el caballero, resultó que era Felipe IV, permitió que el día 15 de noviembre, todo el que quisiera, pudiera recoger las bellotas de las encinas de El Pardo. Y así surgió la romería de las bellotas del día de San Eugenio, que se celebra el domingo más cercano a ese día.
Tras el pregón me he tenido que marchar dado que este día coincidía con el cumpleaños de Maite, mi mujer. Y a lo lejos les he visto marchar con música de dulzaina y tamboril, camino de la Parroquia de la Inmaculada Concepción donde iban a pedir el Santo para llevarlo de romeria hacia el encinar a continuación del Convento del El Cristo de El Pardo, donde después degustarían migas y sangrías antes de retornar el santo. Qué envidia.
Pareces el Cristo de El Pardo, me decía mi madre cuando me pasaba horas y horas leyendo tumbado en un sofá.
En mi breve visita esta mañana me quedan varias estampas. Volver a ver a la simpática mujer de Luis María, conocer a su hija, compartir pasados con un amigo casado con una peñalbina, de la misma Peñalba de Castro. Y averiguar que una sonriente dama, por pregonarlo una amiga, cumplía hoy también años. El mundo es un pañuelo de coincidencias, la madre cumplía años hoy pero la hija me ha comentado que tiene un hermano también de horóscopo escorpio que cumplia años el 6 de noviembre, vaya, como mi hija.
Entre las estampas oficiales he saludado y conversado con José Maria Álvarez del Manzano, alcalde de Madrid, y con José Antonio Martínez Páramo, Concejal Presidente del distrito de Fuencarral-El Pardo, quienes desde hoy saben que la Asociación de Cronistas Madrileños existe.
Gracias Luis Maria por permitir acompañarte en este evento.