CUANDO MADRID FUE CAPITAL DE ARMENIA
Dic 16 2018

EL PERIODISTA Y CRONISTA DE LA VILLA DE MADRID Y GETAFE, ÁNGEL DEL RÍO RECOPILA EN «DISPARATES DE LA HISTORIA DE MADRID» ALGUNOS DE LOS DESATINOS DE LOS QUE LA CIUDAD FUE VÍCTIMA O TESTIGO

Esfera metálica en honor a Colón que diseñó el arquitecto Alberto de Palacio para el Retiro

Hubo un tiempo en el que Madrid quiso ser puerto de mar. Fue en época de Felipe II, cuando el monarca puso interés en comprobar la viabilidad de un proyecto que hiciera posible la navegación comercial y que conectase esta ciudad con Sevilla, capital financiera y comercial por aquel entonces. Sin embargo, la idea de dar caudal suficiente a los ríos Jarama y Manzanares mediante un sistema de esclusas quedó finalmente relegada en el desván del olvido por falta de presupuesto.

También hubo un Madrid que llegó a ser capital de Armenia, cuando el rey León V de Lusignan, cuya fe cristiana le condujo a un largo cautiverio, escogió la ciudad como nuevo baluarte de su perdido reino tras la intervención de Juan I de Castilla. Éstas y otras muchas anécdotas figuran en Disparates de la historia de Madrid (Ediciones La Librería), el nuevo libro que el periodista y cronista oficial de la villa Ángel del Río dedica a la urbe madrileña.

Con un grueso número de títulos sobre la ciudad en su haber, Del Río se retrata a sí mismo como «madrileño y madrileñista», y define como «manía» su afición por «escrutar la historia». «Madrid es una ciudad de contrastes y contradicciones. Su relato está hecho de aciertos y desaciertos, de errores forzados o involuntarios, algunos de los cuales han podido cambiar el curso de su desarrollo urbano y cultural», sostiene el autor. Tras más de dos años paseando esa curiosidad suya por archivos y bibliotecas, ha recopilado parte de su saber en este volumen a modo de «diccionario».

Nefastas operaciones urbanísticas con la especulación como telón de fondo, ambiciosos proyectos que no se llegaron nunca a realizar o monumentos cambiados de lugar o, directamente, desaparecidos son algunos de los retales con los que se confeccionan los 10 capítulos que componen la publicación. Ahí está, por ejemplo, el triste final del Cine Madrid, testigo de acontecimientos como el discurso que el 14 de marzo de 1933 pronunció Manuel Azaña. Tras ser derribado en 2014, fue reemplazado por una tienda de electrónica. La demolición de la Quinta del Sordo, donde Goya pasó sus últimos años de vida en España, o la voladura del edificio que albergó la sede del diario Madrid son otros de los muchos episodios sobre los que el libro recala.

Junto a estos sucesos conviven fracasos tan sonados como el del monumento a Colón, una gigantesca esfera metálica de 200 metros de diámetro diseñado por el arquitecto español Alberto de Palacio, discípulo del mismísimo Gustave Eiffel. En 1892, con motivo del cuarto centenario del descubrimiento de América, se pensó en situar dicha construcción en El Retiro, junto al Palacio de Cristal pero, por desgracia (o por fortuna) la falta de presupuesto fue de nuevo responsable de su descarte.

Tampoco quedan fuera de la publicación ciertos sucesos con regusto castizo, como el fugaz retorno de los serenos que Enrique Tierno trató de promover en 1986. Sin embargo, esta idea romántica no llegó a buen puerto por ser incompatible con las nuevas exigencias de la seguridad pública. El inadecuado uso del Mercado Puerta de Toledo, cuya escasa media de visitantes era de 25 personas diarias, es otro de los recuerdos con sabor a antaño, mientras que la picaresca más evidente sale a relucir en el momento de abordar el origen de las casas de malicia. Dichas construcciones tienen su origen en la imposición de Felipe II de ceder la segunda planta de las viviendas de la villa a los más de 10.000 servidores de la realeza que por aquella época acogió la capital. Como reacción a tal medida, los madrileños optaron por combatir dicha exigencia con la construcción de falsos interiores en las nuevas viviendas que permitieran a sus propietarios eludir tal obligación.

Con todos y muchos otros pasajes en la mano, a la hora de escoger cuál es, en su opinión, el mayor desastre del que Madrid ha sido víctima y testigo, Del Río introduce en su genérica respuesta «la pérdida del patrimonio histórico que ha sufrido en los últimos 150 años». Por eso, cuando se le pregunta cuál es la impresión que le gustaría que perdurase en el público tras esta lectura, responde así: «Me gustaría que se quedase con la imagen de todo cuanto pudo hacerse y no se hizo. Con la de todo lo que fue y la de lo que nunca pudo llegar a ser». Victoria Gallardo.

Fuente: https://www.elmundo.es/madrid/2018/12/15/5c14060c21efa0d9558b468d.html

 

Add your Comment

Calendario

noviembre 2024
L M X J V S D
 123
45678910
11121314151617
18192021222324
252627282930  

Archivos

UN PORTAL QUE CONTINÚA ABIERTO A TODO EL MUNDO