POR PEPE MONTESERIN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
Qué puñeteras son para los conductores las calles en fondo de saco; en Oviedo abundan: Constantino Cabal, Jesús Arias de Velasco, Dr. Fleming, Dionisio Ridruejo, Santa Eulalia de Mérida…, hablo de memoria, igual meto la pata; Paulino Vicente, Mariano Flórez, Monte Auseva…, ¡qué sé yo cuántas! Arzobispo Lauzurica, Vicente Alexandre, Narciso H. Vaquero…, ¡muchas!
Pintor Ribera, Teodomiro Menéndez, Los Acebos, Huerta de Otero, Manuel F. Avello…
Tienen sus beneficios para los vecinos, al tratarse de calles donde el ruido del tráfico queda restringido a residentes y despistados, y sus maleficios para comerciantes, al espantar a transeúntes de paso; también, en cuantos callejones sin salida, podrían ser caldo para alguna revolución; pero ¿cuál?, ¿hacia dónde?.
Sostengo, a tenor de los acontecimientos, que en el siglo donde hemos entrado sólo podremos salir de culo.
Fuente: http://www.lne.es/blogs/la-mar-de-oviedo/culo-de-saco.html