POR JOSÉ ORTIZ GARCÍA, CRONISTA OFICIAL DE MONTORO (CÓRDOBA)
En el día de hoy y siguiendo con algunos documentos hablaremos de la CUARENTENA que en Montoro se vivió con motivo de un brote de cólera morbo asiático que azotó la población de Montoro en la primera mitad del siglo XIX.
El cólera es una enfermedad que afecta principalmente al sistema digestivo y que de no tener medidas adecuadas, la persona muere deshidratada como consecuencia de la diarrea aguda que le afecta.
En 1833 el ayuntamiento decretó el cierre de las tres puertas de Montoro (Portichuelo, Herrerías y Cerrillo), la vigilancia de la misma con escopeteros, guardianes con perros de caza, así como el aislamiento de enfermos en lazaretos abiertos a extramuros en Virgen de Gracia y San Roque, aunque hubo que habilitar otros más en campos aledaños.
Aquí os dejo el pequeño aporte documental donde se puede leer la obligación de los vecinos de realizar guardias de veinticuatro en veinticuatro horas por turnos rigurosos, y cómo el Ayuntamiento daba armas y animales de caza a éstos.