POR ANTONIO BOTÍAS SAUS, CRONISTA OFICIAL DE MURCIA

Licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Murcia (UMU), experto universitario en Toxicología y miembro de la Real Sociedad Española de Química, Daniel Torregrosa preside la Asociación de Divulgación Científica de la Región (ADCM). Su pasión es divulgar, de forma seria y divertida, el conocimiento científico. Y eso le ha valido diversos reconocimientos. Su blog ‘esepuntoazulpalido.com’ es un referente que ahora, además, opta a los Premios Bitácoras 2015.

Ha logrado convertir su blog ‘esepuntoazulpalido.com’ en un referente. ¿A qué se debe el éxito?

No lo sé. No me lo planteé como algo más allá de una afición. Sí he sido riguroso en cuanto he escrito, pero dándole un toque personal divertido. Una de mis máximas desde que comencé dice: «Es mejor encender una vela que maldecir la oscuridad».

¿Cómo es posible elevar el nivel científico de la sociedad?

Desde muchos frentes e implicando a todos los actores. Si bien las actividades de divulgación elevan el nivel de cultura científica, hay que empezar desde la base: las escuelas y los hogares. Las políticas de educación deben apoyar la transmisión de este conocimiento y los padres deben implicarse en la educación. No basta con pasarse la pelota; hay que pelear en las trincheras y comprometerse.

En uno de los ‘posts’ de su blog se preguntaba: ‘¿Por qué divulgar la ciencia con entusiasmo?’.

Contaba que el gran divulgador Carl Sagan, conocido por la mítica serie ‘Cosmos’, respondía a esa pregunta así: «Cuando uno está enamorado quiere salir a contárselo a todo el mundo». En mi caso, comparto ese ‘enamoramiento’. Y lo hago por el placer de descubrir, de ordenar ideas y por el compromiso con mis hijos. Escribo pensando en que me leerán algún día, y tal vez disfruten tanto como yo.

En su perfil @DaniEPAP advierte de que «esos ‘tweets’ se perderán en el tiempo, como lágrimas en la lluvia». ¿Pasará lo mismo con los blogs?

Es una frase que he modificado del final de la película ‘Blade Runner’. Twitter es una herramienta más efímera que los blogs. No ocurrirá. Los blogs perdurarán. La ‘blogosfera’, y en general internet, es aquella biblioteca de Babel que imaginó Borges.

¿Qué temas le interesan más?

Igual escribo una serie sobre la influencia de la mitología en la ciencia, que de curiosidades de toxicología, gastronomía, astronomía, neurociencia, música, historia o libros. No me limito a la clásica y errónea elección entre una de «las dos culturas» (ciencias vs letras). Solo hay una.

¿A qué nivel sitúa a Murcia en el panorama científico mundial?

En Murcia se realiza una ciencia de muy buena calidad con un impacto importante. Quizá a nivel mundial, si hay que destacar a una figura, lo haría con la de mi amigo el doctor Pablo Artal Soriano, director del Laboratorio de Óptica de la UMU, y que ha sido premiado y reconocido internacionalmente por sus investigaciones y patentes en el mundo de la óptica.

¿Qué científico murciano merecería una estatua?

Citaría a varios: José Loustau, primer rector de la UMU; Antonio Pedro Rodríguez o Luis Calandre, discípulos de Ramón y Cajal; el fisiólogo Francisco Sabater, que fue profesor mío… Deberíamos tener varias estatuas con nombres ilustres.

¿Y científicas?

El papel de la mujer en la investigación llegó tarde a Murcia. Pero hoy hay destacadas investigadoras como la inmunóloga Rocío Álvarez, la bióloga Alfonsa García Ayala o Francisca Sevilla. Además, Marie Curie, la mujer más importante de la historia de la ciencia, visitó Murcia en 1931. Mereceríamos tener una placa en el lugar donde estuvo la única persona con dos Nobel en campos distintos de la ciencia: química y física.

Fuente: http://www.laverdad.es/