POR FRANCISCO PUCH JUÁREZ, CRONISTA OFICIAL DE VALDESIMONTE (SEGOVIA)
Escribir algo sobre Segovia o personajes segovianos es algo que siempre me bulle debajo del sombrero que nunca he utilizado para darle libertad a mi pensamiento, pero hay algo de rabiosa actualidad que viene atormentando la mente vengativa de ese presidente en funciones que tenemos, y en vista de que le ha salido la burra mal “capá”, con el asunto estrella de su gobierno, lo del “Cerro los Callaos”, ahora, para vengarse de la familia Franco les quiere arrebatar el Pazo de Meirás.
¿Y qué tiene que ver esto para relacionarlo con Segovia y los segovianos, se preguntarán algunos? Pues muy fácil porque uno de los descendientes de Franco, Luis Alfonso de Borbón, tiene ascendencia segoviana al ser nieto de don Jaime de Borbón y Battenberg, hijo de S.M. el Rey Alfonso XIII, y que a la sazón había nacido en mi pueblo La Granja de San Ildefonso de cuya cuna me siento muy orgulloso pues nací en la Plaza de Isabel de Farnesio, en la Tahona, en el año de 1930, siendo uno de los cuatro varones supervivientes de aquella mítica generación de los 16 hermanos Juárez; y por si no fuera bastante que Don Jaime de Borbón hubiera nacido en aquel versallesco palacio, al igual que Don Juan y Dª. Beatriz, su egregio padre le distinguió otorgándole el Ducado de Segovia en 1933, título que de haber sido hereditario habría pasado a manos de su hijo Alfonso de Borbón Dampierre y por ende a su nieto Luis Alfonso de Borbón Martínez Bordiu.
Y don Jaime de Borbón era tan segoviano que a su muerte, ocurrida en Roma, pidió que se le enterrara con Tierra de Segovia. Posteriormente su sobrino don Juan Carlos I, siendo Rey de España, ordenó que lo trajeran al Panteón de Reyes de El Escorial.
Y cabe preguntarse: ¿si Don Jaime no hubiera renunciado a sus derechos a la Corona, quién habría sido el Rey de España?. A estos efectos habría que leer el libro “La larga marcha hacia la monarquía” de D. Laureano López Rodó, del que tengo en mi biblioteca un ejemplar dedicado, y que hoy se encuentra agotado en librerías.
Pues resulta que don Jaime de Borbón tuvo dos hijos D. Alfonso de Borbón Dampierre, Duque de Cádiz y don Gonzalo. Y resulta también que Don Alfonso de Borbón, Duque de Cádiz, contrajo matrimonio con doña María del Carmen Martínez Bordiu, nieta, nietísima, de su abuelo don Francisco Franco Bahamonde. Y también viene a resultar que el matrimonio tuvo dos hijos, Francisco de Asís, muerto en accidente, y Luis Alfonso de Borbón Martínez Bordíu que a la sazón es el Duque de Anjou descendiente del Rey Sol de Francia Luis XIV, y en consecuencia heredero del trono de Francia caso de que se reinstaurase la monarquía en dicho País, y sobre el que hubiera recaído el título de Duque de Segovia, y a mayor abundamiento tendría sus derechos a la Corona de España, si su abuelo Don Jaime de Borbón no hubiera renunciado a ellos.
Y en el caso en que el título de Duque de Segovia hubiera sido hereditario, le habría correspondido al Duque de Cádiz y a su vez a don Luis Alfonso de Borbón, bisnieto de Franco y defensor como el resto de su familia de que la tumba de su abuelo no sea profanada y levantada su pesada losa de manera ilegal por el odio y la venganza de quien quiere ser presidente electo del gobierno de España.
Por otra parte, ignoro los motivos por los que don Luis Alfonso de Borbón descendiente directo del segoviano Don Jaime de Borbón, no es nunca mencionado en escritos o crónicas de nuestra segoviana tierra. Hay muchos granjeños que tal vez no conozcan la historia de su pueblo, o que conociéndola prefieran no hablar de ella.
Y pelillos a la mar, hay personajes en la Historia Universal, que son y serán mencionados a través de los siglos muchos años después de su muerte y que en esa Historia Universal seguirán pasando de generación en generación, pero algunos mindundis aprendices de políticos que han venido hoy a sacar brillo a los asientos del Congreso, del Senado y de las Asambleas de las diecisiete Españas, no pasarán a ser mencionados en ningún libro de la Historia Universal. Es un decir. Mañana hablaremos de Segovia, si aún estamos aquí.
Fuente: http://www.eladelantado.com/