POR RICARDO GUERRA SANCHO, CRONISTA OFICIAL DE ARÉVALO (ÁVILA)

Tenía muchas ganas de conocer este complejo arqueológico y paleontológico que es todo un referente mundial por sus hallazgos importantísimos, entre los que destacan de forma muy especial los restos humanos más antiguos de la península ibérica.

Un hallazgo que fue capaz de aglutinar a los mejores investigadores en la materia, desde los primeros, Jordá Cerdá y Apellániz, a los más conocidos, el equipo de Emiliano Aguirre, Juan Luis Arzuaga, Bermúdez de Castro y Eudald Carbonell, siempre con la ayuda de numerosos colaboradores en cada campaña anual. Un referente mundial en estas investigaciones científicas que aún tienen mucho que ofrecer, porque siguen las sorpresas. 

Ya hace unos años, con motivo del congreso nacional de Cronistas de España, celebrado en Burgos, tuvimos la oportunidad de conocer con guías excepcionales el Museo de la Evolución Humana de Burgos, que me resultó espectacular e impresionante, por el contenido, pero también el contenedor…tengo grabadas en mis pupilas las miradas penetrantes y tan reales de esas recreaciones de los hombres primitivos que habitaron estas tierras. Tengo que manifestar que la mirada de “Miguelón” me cautivó, tan real y penetrante…

Este verano me encaminé hacia el norte, los pirineos de la Jacetania, pero lo hice por una ruta nada convencional, quería antes hacer unas paradas por algunos lugares emblemáticos de nuestra historia que me resultaba apremiante no dejar pasar ni un momento más para subsanar esas carencias.

Es cierto que ves muchas fotos y vídeos, que realizas lecturas, que hoy puedes navegar a través de las redes por tantos lugares insospechados. Pero no es igual, el directo y tantas sensaciones vividas, olores y calores, especialmente este verano, que nos ha acompañado demasiado tiempo con temperaturas especialmente altas no tan agradables para realizar visitas de campo. 

Ya había realizado una visita virtual por internet, que ayuda mucho, como lo he hecho otras veces con otras visitas… pero, en esta ocasión no ha sido tan eficaz y elocuente como otras veces, porque tres sitios, dos pueblos, aquí la entrada, el bus y al sitio inicial… un lío. Lo digo y me dicen que ya lo ha apuntado mucha gente, la señalización es confusa… al final sale la auténtica razón, la cosa está en dos pueblos ¡y todos quieren pringar! En definitiva, una razón política provinciana. Camino polvoriento blanco, ya podía yo lavar el coche para ir decente de viaje… Menos mal que había madrugado y tenía tiempo de sobra.

Por mucho que te imagines, no tiene nada que ver con la realidad, también en eso influye mucho un buen guía… y si además te gusta la arqueología, para que más. A pesar del enfado del ir y venir, al final mereció mucho la pena.

Grandes hallazgos que nos hablan de sitios que son Patrimonio Mundial por la Unesco, con la Junta de Castilla y León a la cabeza. Cinco especies de homínidos: Homo Antecesor; Homo Heidelbergensis; Homo Neanderthalensis; y Homo Sapiens, la actual. Lugares en la trinchera del ferrocarril como la Sima de los huesos, la Gran Dolina, la Sima del Elefante y Galería, entre otros.

Nombres que nos llegan llenos de simbología, enriqueciendo la nómina de importantes hallazgos…Miguelón o Excalibur. Todo un referente mundial tan bien representado en el Museo de la Evolución Humana de Burgos.   

Cuando estoy cerrando estas líneas me llega la noticia del fallecimiento del historiador Pedro Navascués Palacio, una autoridad en el mundo del arte y la arquitectura, con una vida brillante en la docencia y como autor de numerosas obras, magníficos libros de arte y arquitectura, artículos y conferencias, todos cargados de sapiencia. Su importante biografía está al alcance de todos, por eso hoy quiero detenerme en unas pinceladas sobre su relación con Arévalo a través de las Lecciones de Arquitectura Española: El Mudéjar, todo un referente para este arte tan nuestro. 

Como colaborador que fui en aquellos cursos, le conocí, le admiré y también surgió amistad. La ciudad se viste de luto por su pérdida. Aquel referente que conocíamos coloquialmente como “Congresos del Mudéjar” fueron el descubrimiento de nuestra humilde arquitectura y también, conociéndola más, amarla como algo muy nuestro. Murió su director Fernando Chueca Goitia, todo un referente en la arquitectura española, nos descubrió otra mirada para ver La Lugareja, en otra dimensión. Y qué casualidad, a él dediqué mi primera columna; murió recientemente José Luis Gutiérrez Robledo, el alma mater, el abulense defensor de nuestro patrimonio, maestro y amigo, que hizo descubrir en mí el amor por nuestro mudéjar y su valor; y ahora Pedro Navascués, el tercer puntal de aquellos cursos… cuyas intervenciones siempre fueron una referencia certera… 

Arévalo está de luto en su recuerdo. 

FUENTE; EL CRONISTA