POR JOSÉ ORTIZ GARCÍA, CRONISTA OFICIAL DE MONTORO (CÓRDOBA)
Así es como se conocía desde el siglo XVIII el centro neurálgico donde la comunidad carmelita se repartía para sus quehaceres cotidianos.
En este emplazamiento sabemos que algunos vecinos de siglos anteriores mandaban, mediante testamento, iluminar al Señor del Huerto que parece que una temporada estuvo bajo uno de estos portones, posiblemente durante el arreglo y obra de la iglesia de Santiago desde 1725 – 1732.
En el año 1842 el convento se entrega al Ayuntamiento para que en el se establezca la Cárcel Pública, juzgado de primera instancia y una escuela de instrucción primaria. Poco tiempo después, en 1872 una parte del edificio se entrega para que en el se establezca el Casino Primitivo de la Plaza de Jesús pagándose por su uso una cuota de arrendamiento al consistorio, según nos aparecen en los libros de cuentas municipales.
En 1902 este patio se obra con objeto de una cesión que realiza el Ayuntamiento en favor de algunos socios de Círculo Primitivo, ya que el patio estaba anteriormente ocupado por los presos de la Cárcel.