POR JOSÉ ORTIZ GARCÍA, CRONISTA OFICIAL DE MONTORO (CÓRDOBA)
Aquí os dejo una fotografía del Charco a fines del siglo XIX o principios del XX, siendo el primer plano una pequeña multitud reunida ante la casa de don Bernardo Francés.
Muchos creen que el nombre de Charco tiene su origen en la contienda del 1936 como reguero de sangre, pero el nombre esta mucho más lejos de sucesos desagradables y funestos.
El origen de su nombre ya lo encontramos en los documentos propios del siglo XVI, diciéndose en algunos de ellos que la Plazuela del Charco debe de repasarse para la procesión del Corpus ya que se «acumulaban aguas y lodos en el centro de la misma». Por lo tanto el Charco no tiene más misterio que el acumulo de agua de lluvia en algún lugar del mismo.
Como anécdota podemos indicar que tras la Desamortización de Mendizabal en 1836, el Convento de Carmetitas quedó abandonado, quedando sólo la iglesia para el uso del común. El resto del edificio, hoy ocupado por el Círculo Primitivo, fue repartido entre escuela para niños y Cárcel pública.
De la misma forma decir que en el centro del Charco tenemos constancia de la existencia de un triunfo de piedra dedicado a Nuestra Señora de las Angustias allá por el siglo XVII.