POR JOSÉ ORTIZ GARCÍA, CRONISTA OFICIAL DE MONTORO (CÓRDOBA)
Este barrio, para el que desconozca el dato, dota a Montoro de una particularidad que solo tiene el Guadalquivir en Córdoba y en Sevilla, que es la originalidad que el río parte en dos a la población.
El origen de este barrio se remonta al siglo XVIII momento en el que los terrenos para habilitar mayor cantidad de casas en el núcleo primitivo se hace cada vez más difícil y los habitantes tienden a solicitar las tierras del entorno de la ermita de Santa Ana, cruces del Calvario de San Roque, porciones de tierra alrededor del Corral del Concejo y otras muchas más.
El origen del nombre no es el de Retamar, sino de Retamal por la gran cantidad de retamas que crecían en la rivera de este bello entorno, principalmente por el cauce de crecida del rio y en la zona que actualmente se encuentra la fábrica de aceites de Campplio.