DOMINGO MURCIA OFRECE UN PREGÓN ÁGIL Y CON SENTIMIENTO
PREGÓN DE DOMINGO MURCIA ROSALES, CRONISTA OFICIAL DE ALCALÁ REAL (JAÉN).
Es posible pronunciar tres veces un pregón y ser original? Sí, así lo demostró anoche el cronista oficial, Domingo Murcia, en su discurso anunciador de las fiestas patronales en honor de Nuestra Señora de las Mercedes. El acto, celebrado en el teatro Martínez Montañés, evidenció la maestría del orador. En un alarde de originalidad, él mismo fue su propio pregonero. En su introducción, dio pinceladas de su vida y habló incluso de sus defectos. Expresó como aval de su cometido su condición de mariano y de “alcalaíno sin fisuras”. Incluso dio a entender que realmente no era su tercer pregón, sino el primero a la venerada imagen, pues el inicial de 1983, fue “de rebote” al no encontrarse pregonero para eso año, y el de 1994 tuvo que asumirlo cuando la persona elegida “se cayó del cartel” porque no le venía bien el día.
El discurso de Domingo Murcia, además de original, fue ágil, ameno y lleno de conocimiento y de sapiencia de la historia y de las gentes de Alcalá. Dedicó sus palabras a la memoria de dos cofrades, Mari Lola Aguayo y Rafael García Aguilera. También tuvo un recuerdo para los fallecidos a causa de la covid-19 y para el malogrado e inolvidable Francisco Zúñiga.
El pregón incluyó, intercaladas, varias poesía, que le confirieron más atractivo y le dieron una impronta lírica. Declamó versos de Gerardo Diego y del Arcipreste de Hita, así como el propio himno a la patrona. No faltaron la letra de una partitura judeocristiana y un pasaje del Quijote. En su intervención, el cronista oficial recreó, con maestría, el ambiente que rodea el encuentro de alcalaínos y visitantes con la Virgen de las Mercedes, que, durante su procesión, es percibida de diferentes formas según quién la contemple.
Como muestra de sus amplios conocimientos sobre la historia de Alcalá la Real, el cronista se sumergió en los orígenes y en la evolución de la Virgen de las Mercedes, de sus comienzos medievales como Nuestra Señora de la Antigua, una advocación que también se conmemora el 15 de agosto.
Sacó a colación la vinculación de la imagen con las gentes del campo. En la recta final del acto, Murcia dejó patente su honda fe y elogió la figura de María, como madre a la que pedir. “Cuando hace su aparición la Virgen de las Mercedes, te miro, Alcalá, y me emociona comprender que te unes a tu dulce Patrona como el sol a la cuna de la nueva mañana. He dicho”, concluyó el orador entre el aplauso de los presentes.
