POR JOSÉ ANTONIO FIDALGO SÁNCHEZ, CRONISTA OFICIAL DE COLUNGA (ASTURIAS)
Hace años, en un día frío y con amenaza de nieve, comenté una mañana en la Sala de Profesores de mi Colegio: «¡Vaya día COMESTÍN que está hoy!».
Estupor, risas generalizadas y «murmullos» de censura: ¡Esto son dichos de Fidalgo…!
Por la tarde me presenté con el Vocabulario Dialectológico del Concejo de Colunga, de Braulio Vigón, donde dice: «COMESTÍN: adj. Se aplica al tiempo crudo y seco».
Respuestas de silencio. Y otra vez el mismo susurro: ¡Este Fidalgo…!
Cuentinos e historias del pasado, pero como tengo buena memoria…
Hoy es Domingo de Antroxu , «Domingo´l Gordu» , que decimos en Colunga y que por tierras asturoccidentales le dicen Antroido godoiro. Lo testimonia el cantar:
«Antroido godoiro
pasou por Arbón
cun cesto na mao
comendo rapón»
Pues hoy, amigos míos, es -coincidencias de la vida- un domingo de comestín; con tiempo crudo, amenazante de nieves y con presencia de lluvias.
Fríos que hay que combatir con comidas calóricas y estimulantes.
Anteayer, hablando del pote de antroxu (artículo que superó las 13 000 personas alcanzadas), me comentaba Aurina Infante (lectora asidua) que como postre recomendaba «unes picatostes».
Es curioso.
En Asturias hemos hecho sinónimas las palabras PICATOSTA y TORRIJA («torrexa») para significar exclusivamente el concepto de TORRIJA. En realidad son dos cosas muy diferentes, aunque con un mismo ingrediente principal de partida: rebanadas de pan asentado.
Veamos (y sigo literalmente el diccionario):
PICATOSTA: Rebanada de pan frita en manteca o en aceite.
El plural asturiano es «PICATOSTES».
TORRIJA: Rebanada de pan remojada en leche o en vino, rebozada en huevo batido, frita y finalmente bañada en miel o en almíbar. En asturiano TORREXA con plural en TORREXES.
Como les he dicho: para los asturianos (mejor decir: gentes de Asturias) PICATOSTES Y TORREXES son sinónimos.
Bueno; pues siguiendo el consejo de doña Aurina y para combatir el frío de «esti domingo comestín», les invito (virtualmente, claro está) a «unes picatostes con chocolatín caliente (espesín y un pocu amargu).
Preparen así LES PICATOSTES (las del diccionario y de la historia):
Corten al bies (al sesgo, en diagonal…) unas rebanadas de pan asentado (pan de, al menos, dos días) y humedézcanlas muy ligeramente en agua. Inmediatamente fríanlas en aceite de oliva virgen extra muy caliente cuidando que resulten crujientes al exterior y blandas al interior. Escúrranlas sobre papel absorbente y espolvoreen con azúcar.
Sírvanlas calientes con chocolate también muy caliente.
¡Ah! Y disfruten de un feliz domingo´l gordu entre folixa, mazcaritos y buena mesa.