AMBOS ESTÁN EN LA SACRISTÍA DE LA IGLESIA DE LA CANDELARIA, EN INGENIO, APARTADOS DEL GRAN PÚBLICO, MEDIO OLVIDADOS, PERO EL CRONISTA OFICIAL DE LA VILLA, RAFAEL SÁNCHEZ VALERÓN, TIENE CLARO QUE SON DOS CUADROS DIGNOS DE MUSEO

Ambos están en la sacristía de la iglesia de la Candelaria, en Ingenio, apartados del gran público, medio olvidados, pero el cronista oficial de la villa, Rafael Sánchez Valerón, tiene claro que son dos cuadros dignos de museo. Lo son por su calidad artística, pero también sospecha que por su autoría, aunque esta sea desconocida, al menos por ahora.

Casi no hay rincón del municipio que Rafael Sánchez Valerón no se conozca, pero admite que no reparó en estas dos obras pictóricas hasta que no le puso en su pista otro historiador local, Aurelio Torres, con el que acaba de publicar una pequeña guía del patrimonio artístico del templo parroquial. En la nómina de tesoros registrados en ese libro se hallan estos dos cuadros que el cronista entiende que son dos joyas de primer orden y que, sin embargo, figuran sin autoría reconocida. Eso es así por ahora, porque Rafael Sánchez Valerón, tras una concienzuda investigación, cree saber quiénes los pintaron. Solo quiere que un ojo experto le confirme o no sus hipótesis.

Uno de los cuadros es el de Nuestra Señora de Los Dolores, del que el cronista sí tiene constancia que fue una donación al templo de Juan Xuárez Alvarado, conocido como Capitán Juárez. En su testamento, otorgado en 1840, declaró que ya tenía colocada en la iglesia una imagen de Los Dolores, para la que pedía 40 años de devoción de sus herederos.

«Dado que el capitán era un hombre poderoso y con recursos, lo más probable es que sea una obra de un pintor importante de la época», explica Sánchez Valerón, quien subraya que «tiene toda la estética» de Juan de Miranda. El único pero que él mismo le reconoce a su hipótesis es que este prestigioso pintor canario murió en 1805, aunque también es cierto que ya por entonces el capitán Juárez era un hombre influyente. No en vano, fue alcalde, primero real y luego ordinario, del Señorío de Agüimes (al que pertenecía Ingenio) desde 1794 a 1804, aún vivo Miranda, y quien sabe si pudo habérselo encargado.

Y el otro cuadro en liza es uno del Sagrado Corazón de Jesús, cuyo autor también es desconocido, al menos para los registros oficiales, pero respecto al que Rafael Sánchez casi no tiene duda de que fue obra de Manuel Ponce de León y Falcón. A su favor tiene esta vez una pista aún si cabe más concluyente. Está firmado. Reza así: M. de L. 1867. Y está escrito en rojo. Es uno de los modelos de firmas que Ponce de León usaba para sus cuadros, para los que, dicho sea de paso, con frecuencia usaba el rojo. «Estoy casi 100% seguro, pero necesito la confirmación de un especialista».

Fuente: https://www.canarias7.es/