LA CRONISTA OFICIAL Y ARCHIVERA MUNICIPAL DE PLASENCIA (CÁCERES) ESTHER SÁNCHEZ CALLE, AEXPLICA QUE EL ORIGEN DEL MAYORGA ES DESCONOCIDO
Se repararán algunos desperfectos y el color volverá a los tonos originales tras el repintado al que fue sometido hace unos años El popular abuelo de la Plaza Mayor recuperará el aspecto que tenía en 1973.
No será un gran cambio, pero sí suficiente como para que el actual abuelo Mayorga recupere el aspecto que tenía cuando fue instalado junto a la campana del reloj del ayuntamiento en 1973 por iniciativa del entonces alcalde Juan Francisco Serrano Pino.
La pequeña restauración a la que va a ser sometido este icono de la Plaza Mayor y de toda Plasencia consistirá en reparar algunos desperfectos causados en la figura por el paso del tiempo, y también devolverle los colores originales de hace 45 años tras el repintado del que fue objeto hace algún tiempo, y que generó cierta polémica por la excesiva viveza de los colores y unos tonos que no se corresponden exactamente con los de la bandera de Plasencia.
La intervención sobre el Mayorga ha sido anunciada esta semana por el alcalde, Fernando Pizarro, durante la apertura de la exposición al público del Documento del Mes en el Archivo Municipal, que es precisamente un libro de actas del 21 de junio de 1743 en el que el municipio liberaba la cantidad de 300 reales de vellón para construir e instalar un nuevo Mayorga ante el deterioro que presentaba el anterior.
Los orígenes del abuelo Mayorga se pierden en el tiempo. La archivera municipal y cronista oficial de Plasencia, Esther Sánchez Calle, señala en la información que acompaña a ese libro de actas que la fecha de instalación del primer reloj municipal placentino se ignora.
La única referencia fiable aparece en la obra ‘Descripción de la Ciudad y Obispado de Plasencia’, escrita por Luis de Toro en 1573, en la que se señala que «tiene también el Ayuntamiento, indicando las horas un potentísimo reloj adornado artísticamente». Además, en el interior de la campana existe una inscripción de 1546 en la que aparece el nombre del autor, Diego de Bárcena, en la cual se indica que el reloj fue construido a costa de los siete regidores de la ciudad de Plasencia.
Sobre la figura en sí del primer abuelo Mayorga no hay constancia documental. El estudio más completo sobre su historia fue elaborado a principios de este siglo por José Luis García Martín, durante años redactor de HOY, en un trabajo titulado ‘La medida del tiempo en Plasencia. Mayorga y otros relojes placentinos’.
En él señala que lo más probable es que la figura apareciera en algún momento del siglo XVI coincidiendo con la construcción del reloj. De hecho, originalmente el nombre de Mayorga correspondía al reloj (el de la catedral tiene el nombre popular de Menorga), aunque en la actualidad también se le llame así, por afinidad, a la figura del abuelo que da las campanadas.
El nombre
El origen del nombre es también un misterio. Se especula con el municipio vallisoletano de Mayorga, donde habría nacido su creador, con el baldío con el que se pagaba el mantenimiento del reloj, o con el padre de Leonor de Pimentel, conde de Mayorga, en el caso de que fuera su hija quien hubiera impulsado la construcción. Tampoco se sabe nada sobre el aspecto primigenio, salvo que tenía un gorro encarnado.
Ese abuelo Mayorga original, ya muy deteriorado, fue el que se ordenó sustituir por uno nuevo en 1743 tal y como consta en el libro de actas que durante todo este mes se puede ver en el zaguán del Archivo Municipal, en la calle Zapatería. Estaba forrado de latón y permaneció hasta 1811, cuando fue derribado y destruido por las tropas francesas acuarteladas en la ciudad.
A partir ahí la pista del Mayorga se pierde durante más de un siglo, hasta que en 1935, según testimonios que menciona en su estudio José Luis García Martín, se instaló en el reloj una nueva figura, esta vez de hormigón y elaborada por el entonces maestro de obras del Ayuntamiento, Francisco Mirón.
Ese abuelo Mayorga disponía ya de un brazo articulado, pero pesaba demasiado y eso hacía que el reloj retrasase. Duró apenas un año, pues en 1936 fue destruido de nuevo y la torre del reloj se quedó si abuelo que diera las campanadas hasta 1973.
Fue en ese año cuando el gobierno municipal de Serrano Pino decidió recuperar la figura, que es la que a día de hoy permanece en la torre.
El diseño de la figura fue obra del profesor de música Manuel Calderón Polo, quien recibió como única indicación que debía representar a un anciano con un gorro rojo. El diseño de Calderón fue aprobado por el Ayuntamiento y la construcción se le encargó a la empresa Organería Española, que además instaló un carillón electrónico con la intención de que a unas horas determinadas el Mayorga emitiese la música del himno de Plasencia, cosa que estuvo haciendo durante años, además de dar las campanadas dada hora, aunque no es el muñeco el que golpea realmente la campana, sino otro mecanismo instalado en el reloj.
Organería Española construyó una figura de dos metros de altura y 85 kilos de peso con calzón azul y rojo a rayas verticales, cuello y puños de encaje, medias marrones y casaca verde, zapatos de lengüeta y gorro rojo.
El diseño original de calderón Polo con los tonos concretos de la bandera de Plasencia es el que se tratará ahora de recuperar. Claudio Mateos Plasencia. HOY
Fuente: http://www.hoy.es/plasencia/mayorga-rejuvenece-20180326002553-ntvo.html