LA MUESTRA, QUE CUENTA CON LA COLABORACIÓN DEL AYUNTAMIENTO DE AVILÉS, LA AUTORIDAD PORTUARIA Y LA CRONISTA OFICIAL DE LA VILLA, MARÍA JOSEFA SANZ, RECORRE LA HISTORIA DE LA CIUDAD
Una selección de planos, ortofotos, fotografías aéreas y material audiovisual facilita la reconstrucción de la evolución histórica de Avilés en una exposición que puede visitarse hasta el 31 de marzo en la Casa de Cultura de la ciudad.
La muestra es la última parte del proyecto ‘Vrbe’, en el que un equipo multidisciplinar de investigadores de los Departamentos de Geografía e Historia de la Universidad de Oviedo, coordinados por Miguel Calleja Puerta, han recopilado e interpretado documentos para ofrecer por primera vez una lectura evolutiva de la forma de la ciudad, desde el siglo XII hasta la actualidad.
La muestra, que cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Avilés, la Autoridad Portuaria y la cronista oficial de la villa, María Josefa Sanz, recorre la historia de la ciudad en distintas etapas y recupera para la memoria huellas que han ido configurando la idea de núcleo urbano. La muralla medieval, la marisma, el asentamiento de las fábricas o la barrera ferroviaria son algunos de los ejemplos.
La reconstrucción histórica de la ciudad arranca del siglo XII, en tono al año 1100, con el nacimiento de la primera villa portuaria durante el reinado de Alfonso VI. El primer bloque de la muestra describe la villa preindustrial, con dos núcleos urbanos separados por un brazo de ría: la Villa y Sabugo.
Un aspecto llamativo del Avilés preindustrial es la presencia invasiva de la marisma inundable que rodea la villa y llega hasta sus propios muros. El siglo XIX planteó una profunda renovación de la forma urbana de Avilés. Sobre los vestigios de la ciudad histórica, el Estado liberal y el sistema caciquil ponen la ciudad y su entorno en manos de una burguesía que la moldea según sus intereses, en una etapa que se extiende hasta mediados del siglo XX. Es la época marcada por la demolición de la muralla medieval y la desaparición de monasterios y conventos.
A mediados del siglo XX el entorno de la villa de Avilés experimentó un proceso súbito de industrialización que transformó por completo la fisonomía urbana. La repentina explosión demográfica condujo a un urbanismo de urgencia marcado por la falta de planificación, la carencia de infraestructuras y la segregación sociolaboral.
Al finalizar la Guerra Civil, Avilés seguía siendo una pequeña villa portuaria de limitada base industrial. La irrupción de algunas grandes industrias en las proximidades de la ría de Avilés, como Ensidesa, modificó de manera sustancial la evolución de su forma urbana.
Fuente: http://www.elcomercio.es/