EL CRONISTA OFICIAL DE CÁCERES, FERNANDO JIMÉNEZ BERROCAL, RELATA CÓMO LA CAPITAL SE ABASTECÍA DE NIEVE DESDE EL PIORNAL O BÉJAR
Los vecinos de Montesol reclamaron en abril una intervención y el Ayuntamiento empezó a tomar nota en el mes de junio.
Tras una inspección de la Policía Local y sobre la base de un informe del área municipal de Inventario que advertía de posibles responsabilidades patrimoniales, el equipo de Gobierno ha aplicado las primeras medidas de seguridad en el antiguo depósito de hielo, en las inmediaciones del Paseo Alto.
Desde el Consistorio se adelanta que a partir de octubre habrá una actuación más profunda.
Se llama Pozo de la Nieve, pero seguramente sean mayoría los cacereños que ni siquiera lo conocen. Se trata de un enclave que da testimonio de una etapa histórica, un depósito situado en una edificación en estado de ruina próximo a la ermita de los Santos Mártires, en pleno Paseo Alto y en el entorno de la urbanización Montesol.
El viejo pozo, que estuvo en uso hasta finales del siglo XIX, es reflejo del negocio del hielo en épocas pasadas. No había entonces ni frigoríficos ni congeladores, pero la nieve se traía hasta la capital cacereña desde puntos como Piornal o Béjar, tal y como relata el cronista oficial de la ciudad, Fernando Jiménez Berrocal.
La nieve llegaba en burros en el siglo XVIII y se almacenaba en el pozo a gran profundidad compactada con paja. Cuenta con cinco metros de diámetro y 10 de profundidades y se accede al mismo desde una «pequeña puerta que se encuentra abierta sin ningún tipo de proyección». Así se recoge en un informe de la responsable de la Sección de Inventariod el pasado 26 de junio.
En el mismo, la funcionaria advierte que «acceder hasta el fondo del pozo supone un alto riesgo de accidente», pese a que el depósito esté en un estado aceptable. No así la antigua vaquería en la que se ubica, en «estado de semirruina», avisa. A ello se suma que la falta de actuación municipal podría implicar una «responsabilidad patrimonial de la administración pública por no mantener los inmuebles de su titularidad en condiciones de seguridad».
El Ayuntamiento es propietario de una zona verde en las proximidades al Paseo Alto. Los terrenos se obtuvieron por cesión en la Junta de Compensación del polígono Montesol 2. La Policía Local visitó el inmueble «semirruinoso» y emitió un informe el 5 de junio.
Solo unos días antes, los residentes habían dado la voz de alarma en HOY. «Queremos que se proteja y se rehabilite», planteaba Joaquín Valhondo, presidente vecinal. No se puede decir que el Consistorio se haya quedado cruzado de brazos.
El asunto se puso en manos del área de Infraestructuras y, según ha confirmado el Ejecutivo local, ya ha habido medidas concretas. Son «de tipo provisional y urgentes», con un «pequeño vallado» y el cierre de seguridad con candado para evitar que la entrada de personas pueda suponer un riesgo para la integridad de las mismas.
Sin embargo, los vecinos van más allá. «Pretendemos que el Pozo de la Nieve sea declarado Bien de Interés Cultural (BIC) o intentar que sea visitable», sugería Joaquín Valhondo. Por ahora, lo que se garantiza en el Ayuntamiento es que a las últimas actuaciones realizadas se sumarán otras más a partir de octubre. Tendrán «carácter definitivo», se apunta desde el Gobierno.
Los técnicos municipales han propuesto, como los vecinos, la recuperación del patrimonio etnográfico «dado su valor». «Podría ser objeto de rehabilitación», señala el informe de Inventario. Al contrario de lo que se pensó inicialmente, el bloque está en una zona pública.
Las primeras iniciativas, por ahora, tienen solo que ver con la seguridad. MANUEL M. NÚÑEZ
Fuente: https://www.hoy.es/caceres/ayuntamiento-toma-medidas-20180916000811-ntvo.html