POR JOSÉ LUIS LINDO MARTÍNEZ, CRONISTA OFICIAL DE ARANJUEZ
Una de las zonas más amplias de Aranjuez ubicada en el centro de la población, ha sido y es la Plaza de Las Parejas, propiedad de Patrimonio Nacional. Un lugar diáfano que ha sido utilizado a lo largo de la historia para varios fines, entre ellos para la representación de un juego hípico en parejas a caballo que se celebraba en el siglo XVIII, bajo el reinado de Carlos III; de aquí tomó el nombre de Plaza de las Parejas, pasando por la aglutinación de foráneos venidos de otras poblaciones aledañas con el fin de derrocar la Corona de España en marzo de 1808 –es el mal llamado Motín de Aranjuez–, pasando por la instalación del primer campo de fútbol ribereño, el ferial en las fiestas patronales y septembrinas, la instalación de inmensas carpas de Circo que se asentaban en la localidad, combates de boxeo y diferentes pruebas deportivas. Pero escogemos el segundo de los casos por orden cronológico en el tiempo, el de la utilización de la Plaza de Las Parejas para la instalación del primer campo de fútbol de los tres que oficialmente ha tenido Aranjuez en la historia como municipio, llamado “de la Cuerda” y seguidamente “de las Tablas”. Fue conocido por el campo “de la Cuerda”, porque lo que separaba a los espectadores del campo de juego era una sencilla cuerda alrededor. Y se llamó “de las Tablas”, porque poco tiempo después se cerró el rectángulo de juego, de ese humilde “estadio” de fútbol, vallando todo su recinto con planchas de madera.
Aunque algunas fuentes no oficiales refieren que el fútbol en Aranjuez se inició en la Plaza de San Antonio, desde luego no lo dudamos, pero son las Memorias inéditas que dejó Ángel Sánchez-Guzmán quien a finales del siglo XIX, las que recogen las primeras pruebas deportivas en Aranjuez, como fueron las «carreras de velocípedos, después de bicicletas, y el juego de la pelota entre jóvenes en la Plaza de Parejas».
Otras fuentes oficiales consultadas son los libros de sesiones del Consistorio ribereño, y las del Archivo General de Palacio. La primera porque nos permite saber este asunto en la evolución municipal desde cuando se inició, así como pormenores del que fue el primer club deportivo de Aranjuez; y punto importante sobre la utilización de esta Plaza de Las Parejas como escenario futbolístico desde el punto de infraestructura y de uso por el vecindario. Y en lo concerniente a las fuentes oficiales del Patrimonio de la Corona, obviamente porque al ser estos espacios propiedad de la Real Casa, había que contar con esta Institución para que tuviese la gentileza de cederlo con el fin de que pudiera ser utilizado por el vecindario.
El campo de fútbol “de la Cuerda” o “de las Tablas” en la Plaza de Las Parejas tuvo dos posiciones dentro de la plaza al presentar este terreno una disposición en forma de “L”. Primero fue instalado en paralelo al Palacio Real, en dirección Este a Oeste, es decir, desde la Casa de Oficios a la Plaza Elipsoidal (en dirección a la Estación de Ferrocarril). Pasada la Guerra Civil se instalaba en forma vertical, es decir, en dirección Norte a Sur, desde la mitad de la Plaza de Las Parejas hasta la calle de San Antonio, donde se situaban las Casas de la Regalada y el Abanico, y el Palacio inacabado que fue de Godoy, después de la Guerra Civil, Comandancia Militar.
Una de las primeras referencias sobre el nombre de una sociedad deportiva es la que localizamos en la jornada del tradicional sorteo de Navidad, el día 22 diciembre de 1905, cuando en el Pleno de la Corporación Municipal presidida por Manuel Pastor Gómez, refieren los ediles el auge que había tomado el deporte del balompié, y se alude al equipo del Real Sitio como “Aranjuez Foot-Ball Club”.
Aunque en el Pleno del día 20 de mayo de 1916 presidido por Tomás Banegas Palazón, se cambia el nombre por el de “Sporting Club de Football de Aranjuez”. Y a partir de 1923, es cuando los libros de sesiones municipales dan amplia cobertura a este nuevo deporte que ha desatado la “fiebre” en España, y en especial en la población ribereña.
Hasta aquí el campo de juego estaba “protegido” o separados los jugadores del público, por una cuerda a su alrededor. Una de las primeras referencias sobre el vallado que descuellan de esta investigación, es la que se ofrece en la sesión plenaria del día 13 de julio de 1923 siendo Alcalde de Aranjuez Doroteo Alonso Peral, quien da cuenta de una solicitud de la “Sociedad Deportiva de Aranjuez” de la que era Presidente Deodoro Valle Grijalba, quien solicitaba «autorización para cercar con una valla de madera parte de la Plaza de Parejas para formación de un Campo de Deportes, para lo cual les ha sido concedido por S.M. el Rey, el disfrute de un terreno con autorización para ser cercado por cualquier procedimiento para sus fines; habiendo pensado poner una valla en una extensión aproximada de quinientos metros lineales, según croquis que acompañan, comprometiéndose a respetar el paso senda que la costumbre ha establecido, desde la calle de San Antonio, frente al llamado “Picadero” hasta la calzada de Palacio en la Plaza de Armas, atravesando la Plaza de Parejas, con el fin de no impedir el tránsito público por dicho sitio». Es decir, aquí se describe la segunda opción del terreno de juego, Norte-Sur.
La mayoría de los ediles municipales en clara lógica argumentaban que el Ayuntamiento poco tenía que decir si el propietario del terreno, que era Patrimonio, había concedido su utilización. Se argumentaba en la solicitud que enviaba la “Sociedad Deportiva de Aranjuez”, que «el destino que se ha de dar a este terreno, [era] sumamente beneficioso para la cultura y desarrollo de la juventud». Sin embargo no todos los Ediles eran partidarios de instalar «una cerca o corral de madera frente al Palacio Real, por lo que no debe concederse». Pero otros ediles, incluido el Alcalde, hacían valer como garantía una de las firmas del documento de la “Sociedad Deportiva”, era la de Valle Grijalba, –a la sazón Alcalde de Aranjuez y precursor de numerosas obras de beneficio para el pueblo ribereño–, quien se comprometía a no realizar nada artístico que llamase la atención más que el propio Palacio Real. Resulta desde todo punto de vista llamativo la discusión que se entabló en el Pleno Municipal cuando el propietario del terreno, que era Patrimonio, no había puesto objeción o impedimento alguno a la instalación por primera vez de tablas de madera para vallarlo. No obstante aquí no se aprobó la solicitud, fue en el Pleno Municipal del día 27 de julio de 1923 cuando se aprobaba por unanimidad. Y se inauguraba con la nueva imagen del vallado en las Fiestas de Septiembre.
Al respecto de la madera para cercar el improvisado terreno de juego, este material lo compraron los componentes de la Sociedad Deportiva al proveedor de la localidad Jesús González conocido por “Canina”, que tenía la industria de maderería-serrería en la Calle de la Florida, junto a la Real Capilla de San Antonio.
Otro episodio relevante para el fútbol ribereño fue en 1928, cuando S.M. el Rey Alfonso XIII, concede el título de “REAL” a la “Sociedad Deportiva”, ahora pasará a llamarse “Real Sociedad Deportiva”. Aunque tres años después, con el arribo de la Segunda República, obviamente se pierde el título monárquico de “REAL”.
Tras la Guerra Civil y después de volverse a poner en marcha el futbol, previa autorización de disponer del terreno por parte de Patrimonio Nacional, volvía a la Plaza de Las Parejas. Corre el año 1941 cuando la Delegación de Educación y Descanso solicitaba permiso a Patrimonio Nacional para vallar el recinto futbolístico que habían venido utilizando, pues hasta ese momento el espacio del público con el rectángulo de juego lo separaba una cuerda, era el campo de fútbol “de la Cuerda”.
En 1948 el equipo futbolístico señero de Aranjuez, tras diversos problemas en los registros deportivos, comienza su andadura con el nuevo nombre de Aranjuez Club de Fútbol. Otro aspecto por resolver era el vallado del “campo de fútbol”, un asunto que ya se había producido antes de la contienda civil, y que una vez más se solicitaba a Patrimonio Nacional.
El día 4 de agosto de 1949 comenzaba como Alcalde del Real Sitio y Villa de Aranjuez Carlos Richer López, un hombre que sería determinante en varios aspectos del pueblo, y en especial en que esta Institución concediese el pertinente permiso para el vallado de la Plaza de Parejas. Varios documentos en el Archivo de Palacio en Madrid recogen algunos de aquellos aspectos. El día 3 de octubre de 1949, Patrimonio Nacional daba permiso para que se utilizase de la Plaza de Las Parejas una dimensión de nueve mil metros cuadrados, ubicada en dirección Norte a Sur, es decir, la orientación sería desde la calle de San Antonio hasta la mitad de la Plaza. Y aunque se volvía a vallar, se mantenían las cuerdas interiormente para delimitar el terreno de juego del público y éste podría estar sentado en bancos de madera. El nuevo campo de fútbol vallado se inauguraba el día 9 de octubre de 1949 por el Alcalde de Aranjuez Carlos Richer, el Cura Párroco Paulino Benito, Corporación Municipal, autoridades civiles y militares. Para entonces, la Corporación Municipal presidida por Richer no cejaría en sus gestiones, –como queda consignado en el Pleno del día 9 de abril de 1953–, hasta conseguir un espacio que fuese el campo de fútbol del pueblo de Aranjuez. El campo de fútbol conocido como “de las Tablas” estuvo activo hasta concluir la temporada 1956-1957. Y fue la Corporación Municipal presidida por Carlos Richer quien puso a disposición del balompié local el Campo Municipal de Deportes en la temporada de 1957-1958. Richer dejaba la Alcaldía de Aranjuez el día 21 de febrero de 1958.
De los muchos y notables ribereños que los mayores del pueblo vieron jugar defendiendo los colores del Aranjuez Club de Fútbol, destacamos a dos por sus singularidades: Eusebio Briz Benito que jugaba de defensa central, era el único al que se conoce que tuviera un buen grupo de seguidores y formasen la “Peña Briz”.
Eusebio tuvo que abandonar el balompié por una grave lesión en un pulmón debido a una patada fortuita de un contrario.
Y el otro ribereño que sobresalió ampliamente por sus cualidades, y además porque jugó en dos terrenos de juego distintos, el Campo “de las Tablas” y el Campo Municipal de Deportes en la calle del Foso, fue Juan Manuel Belmonte. Militó en un elenco de equipos de fútbol de primera fila como fueron: el propio Aranjuez Club de Fútbol en el campo “de las Tablas”, Plus Ultra, Linares, Sevilla, Melilla, Jaén, Ferrol, Linénse, Socuéllamos, Moscardó, y concluyó su carrera deportiva en el Aranjuez Club de Fútbol. Aunque tiempo habrá para realizar un amplio repaso futbolístico sobre la vida de Juanma Belmonte.
Publicado el día 7 de febrero de 2014 en El Rincón del Cronista http://joseluislindo.wordpress.com/