POR JOAQUÍN CARRILLO ESPINOSA, CRONISTA OFICIAL DE ULEA (MURCIA)

Mi pueblo tenía fama de proyectar películas de gran cartel; al principio del siglo XX, en Cine Mudo, en el llamado «Salón de Cine y Teatro Reina Victoria», ubicado en la calle Binondo, y, con posterioridad, Cine y Teatro Amateur, auspiciado por el añorado maestro nacional Víctor Martínez del Castillo y los sacerdotes Jesús García y García y José Muñoz Martínez.

El paréntesis ocasionado por la contienda civil española del 36 al 39, no fue óbice para qué, a partir de mayo del año 1939, resurgiera como el Ave Fénix, con la inestable ayuda de los hermanos Cascáles Carrillo, Gumersindo y Jesualdo, amén del infatigable Víctor.

Tras el traslado profesional del maestro cineasta, el empresario murciano Antonio Gómez Abellán, solicitó al consistorio municipal, la apertura de un salón de cine, en la calle Nueva; petición que le fue concedida, siempre que cumpliera con las Ordenanzas vigentes en la materia, según le comunicó la Corporación Municipal con el regidor  Luís García Fernández como cabeza visible. Además, le advirtió que, tanto las películas como las funciones de  Teatro, pasarían por la censura del párroco José Muñoz Martínez.

“El Cine Gómez», que así figuraba en el frontispicio de la nave qué, con anterioridad, fue un almacén de naranjas y limones; tenía unos éxitos de programación y de asistencia de público sin precedentes. De ahí que muchos empresarios pujaron por hacerse con las riendas de dicho salón de espectáculos; siendo la empresa ‘Tomás y Valiente’ quien compró dicho recinto en el año 1949; apostando de forma decidida por la consolidación del Cine y Teatro.

La empresa, dirigida por Gregorio Tomás Ramírez y Mariano Carrillo Valiente, adquirió una fama inusitada en toda la comarca, proyectando películas de estreno y gran calidad tanto españolas como americanas. El desfile de aficionados que acudían a presenciar las películas o funciones de teatro, era continuo, siendo preciso, por razón de  aforo, repetir las películas (en sesiones) en un sin fin de ocasiones. De hecho se proyectaban los sábados, domingos y miércoles; además de los festivos.

A la vez, se representaban obras de teatro de compañías afamadas, con una periodicidad quincenal, tales como: Giménez Pineda, con su obra «Chiquillo» La compañía de Comedias, del actor «Aparicio» (padre de la actriz Rafaela Aparicio Carrillo); la escultural vedette «Finita Rufete»; Los hermanos Aragón; Germigildo y Garci; Ramper…y un largo etcétera.

Los maestros nacionales Bienvenido Campoy, Antonio Martínez,  Felipe Carrillo y  José Carrillo, con la inestimable ayuda de los párrocos del pueblo. José Muñoz Martínez y Patricio Ros Hernández, aleccionaron a la juventud uleana-también a los mayores, con la inestimable ayuda musical de los hermanos Garro Valiente, José María e Isaías; a los que se unieron otros grupos de aficionados.

Ya, el periódico murciano «La Verdad» del día 11 de septiembre de 1949 escribió una página completa reseñando el auge del Cine y Teatro en mi localidad.

Hago alusión, en esta ocasión, de la representación teatral «Los Calatorraos» en marzo de 1955, en la que actuaron artistas noveles locales como: Virginia y Lolita Tomás y Valiente, los niños Mari Luz, Felipe y Gustavo Carrillo; así como de las veteranas Concha López y Carmina Ramírez.