EL ACONTECIMIENTO HISTÓRICO CONGREGÓ ENTRE OTROS AL CRONISTA OFICIAL DE BLANCA, GOVERT WESTERVELD AUTOR DEL LIBRO `BLANCA, EL RICOTE DE DON QUIJOTE´
Fue uno de los actos centrales programados por el Ayuntamiento de Blanca (Murcia) para conmemorar el IV Centenario de la Expulsión de los Moriscos del Valle de Ricote. El pasado domingo, en el kilómetro 3 de la carretera que une Blanca con Ojós, se celebró la señalización y recuperación del Pino del Solvente, en el que la asociación cultural La Carrahila fue la gran protagonista.
El evento reunió a más de medio centenar de personas, entre las que se encontraban los alcaldes de Blanca, Rafael Laorden; Ricote, Celedonio Moreno; Ojós, Pablo Melgarejo; Villanueva, José Luis López, y Abarán, Mónica Honrubia, en representación de su primer edil, Jesús Molina.
También acudieron Joaquín Salmerón, director gerente de la Fundación Valle de Ricote; el cronista oficial, Ángel Ríos y el diputado Jesús Cano. Como maestros de ceremonia actuaron Joaquín Caballero y Jesús Joaquín López, de La Carrahila, que manifestaron que este paraje era utilizado como lugar de reunión por los representantes de las aljamas mudéjares medievales y los concejos de moriscos.
Ambos citaron al historiador Miguel Rodríguez Llopis, a quien se debe el conocimiento sobre la organización política de la población valricoti antes y después de la conversión al cristianismo».
El acontecimiento histórico congregó al cronista oficial de Blanca, Govert Westerveld autor del libro Blanca, El Ricote de Don Quijote; al profesor de Antropología la UMU Francisco Flores Arroyuelo, que trabajó junto a Julio Caro Baroja y leyó un poema de Vicente Medina; al doctor José María García Avilés, autor de la obra Los moriscos del Valle de Ricote, y a la profesora de la Universidad de Murcia Isabel García Díaz, coautora de la obra Documentos de los moriscos de Ricote y Ojos, para quien era de justicia realizar este acto de desagravio, por lo injusto y arbitrario que fue, porque la gente no era morisca, sino cristianos de corazón.
Seis pueblos, seis piedras
Junto a un joven marroquí, asentado en la localidad, el alcalde de Blanca sostuvo que ´se ha dado un repaso a la historia morisca, pero esto fue pasado y ahora nos toca vivir el presente con estas personas que se merecen la integración´.
Tras la firma por parte de los ediles de la carta magna de expulsión de los moriscos del Valle de Ricote, se procedió a introducirla, junto a los libros de los autores antes citados y su posterior sellado y entierro, en el nuevo Pino del Solvente, bajo cuya sombra se distribuyeron seis piedras a modo de asientos que representan a los seis municipios de la Encomienda de Ricote que, antaño, se reunían en este paraje.
Al final, se descubrió el cartel informativo que junto al pino y los seis asientos prevalecerá en el tiempo como símbolo de unión de los pueblos de este valle en la Edad Media.
Fuente: http://www.laverdad.es/murcia/ – Jesús Yelo