POR JUAN ANTONIO ALONSO RESALT, CRONISTA OFICIAL DE LEGANÉS (MADRID).
La localidad de Sigüenza fue testigo hoy de una emotiva ceremonia religiosa celebrada en honor a San Roque, patrón de la localidad. El epicentro de esta tradicional festividad, que data de hace más de 150 años, volvió a encontrarse en la hermosa iglesia de las Ursulinas de Sigüenza.
La festividad de San Roque es una ocasión significativa que reúne a las tres parroquias de Sigüenza, quienes se turnan anualmente para presidir la celebración. En 2023, la parroquia de Santa María tuvo el honor de encabezar los cultos, con la presidencia del sacerdote Julián García Sánchez, acompañado por Jesús de las Heras y el diácono Juan Antonio Montoro.
La alcaldesa de Sigüenza, María Jesús Merino, junto con la corporación municipal, asistieron a la misa. Posteriormente, alrededor de las 12:30 horas, se llevó a cabo la procesión de San Roque por el paseo de La Alameda y la calle que lleva su nombre, acompañada por los dulzaineros locales.
San Roque, conocido por proteger contra pestes y males, nació en Montpelier y fue canonizado en 1584. Su culto llegó a España a finales del siglo XV y se convirtió en patrono de diversas ciudades y pueblos. En Sigüenza, la festividad se originó en respuesta a las epidemias de peste, ya que San Roque es su patrón y protector. A lo largo de los años, el culto a San Roque pasó a la iglesia de las Ursulinas, mientras que la antigua ermita se convirtió en un espacio cultural.
Las celebraciones de San Roque, que incluyeron conciertos y eventos taurinos, se prolongarán hasta el 20 de agosto, culminando con la procesión de los faroles, una fiesta de interés turístico regional que agrega un toque especial a esta tradición centenaria en Sigüenza. NUEVA ALCARRIA