CUENTA ALEJANDRO LAMAS, A LOS EFECTOS CRONISTA OFICIAL DE CORCUBIÓN, QUE SU PADRE SIEMPRE LE CONTABA QUE LOS BARCOS INGLESES QUE ENTRABAN EN LA RÍA PARA HACER CARBÓN FUERON LOS ENCARGADOS DE INTRODUCIR EL FÚTBOL EN EL MUNICIPIO

Cuenta Alejandro Lamas, a los efectos cronista oficial de Corcubión, que su padre siempre le contaba que los barcos ingleses que entraban en la ría para hacer carbón fueron los encargados de introducir el fútbol en el municipio. Y eso ocurría hace ya casi un siglo. No hay constancia gráfica de todo, pero sí del prime equipo, el Atletic Club Corcubión, «e parece ser que foi o primeiro Club organizado como tal. Anteriormente xogábase improvisando equipos», relata. Quiere la suerte, o el trabajo bien hecho, que las imágenes que dan fe de ese conjunto, obra de Romero, las conserva en su archivo personal. Y, además, obras de gran calidad fotográfica, que han resistido el paso del tiempo de una manera inigualable. En alguna ocasión -explica- lo ha comentado con Manuel Sendón Trillo, fotógrafo y profesor de fotografía en Bellas Artes de Pontevedra, y ha coincidido en que Romero usaba una técnica avanzada para la época. Dos de las imágenes que atesora están realizadas en la Rúa de Atrás, junto al conocido como Arco da Casa de Recamán, donde residía el fotógrafo. Uno de los que aparecen, el portero, era su tío Rubén Lamas Trillo, que murió muy joven, de tuberculosis, en la primera mitad de la década de los años treinta, en plena República. En un tiempo en el que además -recuerda- estaban prohibidos los entierros religiosos, y justamente tuvo que ser en la festividad de San Marcos, el patrón de Corcubión. El sepelio tuvo que organizarse echando mano de la banda de música y con el cura vestido de paisano, señala. «Era un home moi popular», señala de su familiar guardameta, organizando actividades de fútbol, pero también en la comisión de fiestas o en el club de boxeo. Su hija ya casi ni le recordaba, de lo pronto que se fue. De los demás integrantes del equipo tiene algunas referencias, pero pocas. Hace ya mucho tiempo de eso, y buena parte murieron entre los años 70 y 80. El primer campo no se sabe dónde estaba, después vino el de Amarelle, el de Archilos. El Atletic pasaría a ser el Huracán, y después la historia siguió.

La cuentan detalladamente -la de la Liga da Costa- Xosé María Lema y Xosé María Rei Lema, tanto desde su creación en los 60 como los tiempos de la «prehistoria», como los definía ayer el propio Rei. Señala que la mayor parte de los equipos en pueblos destacados comenzaron entre los años 10 y 20.

Otra cosa es que haya crónicas o fotos suficientes para documentarlo todo con exactitud de datos. En las ciudades, como A Coruña, ya antes, a finales del XIX, indica el investigador y escritor. En esa época también daba sus primeros pasos el Junquera, en la vecina Cee. El Bergantiños es del 23, pero mucho antes ya había otros equipos que se acabarían uniendo y formando el que es hoy uno de los grandes conjuntos de la provincia de A Coruña. En todo caso, imágenes como la de Corcubión permiten entender mejor los inicios de un deporte que aún es el que manda en la Costa da Morte.

Fuente: https://www.lavozdegalicia.es/ – S. G. Rial