PARTICIPA JOSE ANTONIO MELGARES GUERRERO, CRONISTA OFICIAL DE MURCIA CARAVACA
Un proyecto encargado por la Comunidad Autónoma prevé recuperar los dos murales que en 1955 pintó el artista Antonio Hernández Carpe (Espinardo, 1921-Madrid, 1977) para el vestíbulo principal del antiguo Hospital Provincial de Murcia. Cuando el edificio fue demolido en el año 1999, la obra se desmontó y se guardó en un almacén. Ahora el objetivo es que las piezas pictóricas regresen al Reina Sofía, el centro sanitario que en 2005 sustituyó al viejo hospital. La iniciativa pondrá fin a una larga reivindicación sobre el olvido que sufren estas joyas de toques vanguardistas.
En principio, los murales no quedarán expuestos en el ‘hall’ sino que se instalarán en la bajada al salón de actos, tras analizar el espacio disponible y consultar las posibles opciones con la dirección del hospital. Los trabajos requerirán de un complejo despliegue técnico, a base de andamiajes y grúas, debido al volumen de las piezas, que en su día se arrancaron con la pared incluida. Los murales ocupan una superficie de 80 metros cuadrados y tienen un peso de unos 2.000 kilos. Además, a la hora de proceder al montaje los encargados deberán velar especialmente para no alterar el normal funcionamiento del centro sanitario.
La intervención correrá a cargo de la Dirección General de Patrimonio de la Consejería de Hacienda, bajo la supervisión del arquitecto Fernando de Retes, autor del proyecto de recuperación y recolocación. Estos murales de Carpe representan oficios tradicionales y escenas de la huerta. En una de las estampas aparece la fachada del antiguo Hospital Provincial. Antes de proceder a la recolocación, el grupo pictórico deberá pasar por un taller especializado con el fin de restaurar los desperfectos que dejaron tanto el desmontaje inicial como el paso del tiempo.
Pendiente de la licitación
De Retes ya ha visitado el hospital Reina Sofía con el fin de supervisar tanto el futuro emplazamiento como el dispositivo necesario para proceder al montaje, en coordinación con la dirección del centro sanitario. De momento, todavía no hay fechas para proceder a la intervención. Desde la Consejería de Hacienda solo confirman que el proyecto ya está terminado y que ahora hay que iniciar el proceso de licitación de las obras. Insisten en que los trabajos cuentan con el visto bueno de la Dirección General de Patrimonio y de los responsables del Servicio Murciano de Salud (SMS) y del propio hospital.
La reposición de estas pinturas coincide con la creación de la fundación de arte El Mural, que echa a andar con la intención de catalogar y proteger la extensa obra que Hernández Carpe dejó por buena parte de la geografía española. La misión se presenta como una titánica tarea. Y, por desgracia, para algunas piezas se llega tarde, como es el caso de unas pinturas que decoraban la Biblioteca Nacional, en Madrid, y que se destruyeron en los años 80 del siglo XX durante unas obras de remodelación. El objetivo de la fundación es que algo así no vuelva a suceder, como indica Celina Hernández-Carpe, hija del artista y presidenta de la nueva entidad. En declaraciones a LA VERDAD, confía en que la recuperación de los murales del antiguo Hospital Provincial se convierta pronto en una realidad, y recuerda que se trata de «una promesa que lleva mucho tiempo durmiendo el sueño de los justos».
A Celina Hernández-Carpe acompañan en la fundación Luis Alberto Andreo Hernández, como vicepresidente; Araceli Gómez, secretaria, y los patronos Vicente Martínez Gadea, Juan García Sandoval, José Antonio Melgares, Santiago Delgado, Germán Ramallo, María Teresa Marín y Loreto López. Su labor se centrará en «sacar a la luz» la obra del artista y «ver en qué condiciones se encuentra». Preocupa al patronato, por ejemplo, el futuro de unos murales que se conservan en un edificio de RNE en el parque de la Antena de Las Torres de Cotillas. El entorno será remodelado por el Ayuntamiento para transformarlo en un parque urbano. La hija del artista espera que el proyecto sirva para la puesta en valor de esas pinturas
Hernández Carpe, formado en la Escuela de Artes y Oficios de Murcia y en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid), destacó por su gran capacidad de trabajo y su habilidad para las obras de gran formato. Nada se le resistía, desde murales a vidrieras y pintura de caballete. Tres cuadros suyos se custodian en los fondos del madrileño Museo Reina Sofía. En la Región de Murcia, su arte está repartido por edificios de viviendas, bancos, centros de enseñanza, iglesias, sedes de organismos oficiales y hasta clubes deportivos, desde Cartagena y Murcia a Alcantarilla y Barranda (Caravaca de la Cruz).
A mediados del siglo XX, muchos arquitectos recurrieron a artistas coetáneos para enriquecer la decoración de sus construcciones, en un momento de cambios en el urbanismo. Pero la maestría de Carpe rebasó las fronteras regionales. Trabajó con Fernández del Amo en los llamados pueblos de colonización, que se extendieron principalmente por Andalucía y Extremadura. Sus murales también pueden admirarse en las universidades laborales de La Rioja, Salamanca, Las Palmas de Gran Canaria, Toledo y Málaga, y en varios colegios mayores de Madrid y Cuenca. La intención ahora del patronato es que ese amplio patrimonio «puedan disfrutarlo todos los ciudadanos».
FUENTE: https://www.laverdad.es/culturas/hospital-reina-sofia-20230208211742-ntvo.html