POR JOAQUÍN CARRILLO ESPINOSA, CRONISTA OFICIAL DE ULEA (MURCIA)
Solamente un mes tardó en dar respuesta el Obispado de Cartagena–Murcia, a la solicitud efectuada por el Sr. Alcalde de la Corporación de Ulea D. José Carrillo Hita.
Sí, la petición para la construcción de las tres casetas en el muro que soporta el atrio de la Iglesia Parroquial de Ulea. Dicha solicitud se efectuó el día 26 de octubre de 1952 y la respuesta del Excmo. y Reverendísimo D. Ramón de Sanahuja y Mascé, no se hizo esperar. La carta del Sr. Obispo dice así:
Vista la instancia que nos ha sido presentada por el Sr. Alcalde Presidente de Ulea, solicitando nuestra autorización para la construcción de tres casetas de 2´15 metros de anchura; 2´50 de altura y 3´50 de fondo; socavadas en el muro norte de la Plaza del Generalísimo, que sostiene el atrio de la entrada lateral a la Iglesia Parroquial de Ulea, por el presente, venimos a autorizar y autorizamos, lo que se nos solicita «Salvo los derechos de la Iglesia», tanto de la propiedad del terreno como de las obras que realice el Ayuntamiento, tanto de las actuales como las que se precisen en el futuro, para la seguridad de la fábrica de la Iglesia, en cuanto pudiera debilitarse como consecuencia de la apertura de dichas casetas solicitadas, qué, repito: solamente serán destinadas para la venta de carnes y pescados y, nunca, para otros usos. tal y como ha sido solicitada, sin nuestra previa autorización a servicios municipales del Ayuntamiento de Ulea.
Dicho documento lo firma D. Moisés Lafuente, Secretario Doctoral del Obispado, por orden de D. Ramón de Sanahuja y Marcé, Obispo de la Diócesis de Cartagena-Murcia. En el escrito hay un sello de color violeta del Obispado.
Ulea 30 de noviembre de 1952