POR ANTONIO SANCHEZ MOLLEDO, CRONISTA OFICIAL DE MALANQUILLA (ZARAGOZA).
El parque recreativo del Pilar, en La Palma, es un ejemplo de destrucción y de vida al mismo tiempo, como es la historia de esta isla volcánica que ha aprendido a convivir con la desgracia pero extrayendo su parte positiva. Estos árboles, situados a la espalda del volcán Cumbre Vieja, han soportado durante tres meses la ceniza que arrojaba el volcán. Muchos han perecido abrasados pero los que no, aprovecharán esa ceniza como alimento y garantía de supervivencia. Los nutrientes de la ceniza son vida con la peculiaridad de que filtra el agua de lluvia e impide su evaporación por lo que la humedad es más constante y persistente.
De ahí su utilización también en las viñas que se plantan entre lava. Canarias ejemplo de vida. #TodosConLaPalma #islabonita #LaPalma #islascanarias #volcancumbrevieja