POR JOSÉ RAIMUNDO NÚÑEZ-VARELA Y LENDOIRO, CRONISTA OFICIAL DE BETANZOS, MIÑO Y PADERNE (LA CORUÑA)
El 11 de mayo de 1986, dos meses después de la adquisición del complejo del Pasatiempo por el ayuntamiento de Betanzos por ante el notario don Joaquín Delibes el 1º de marzo de 1986, y con el fin de comprobar sobre el terreno las posibilidades de recuperar el emblemático Estanque de los Papas, el más característico y afamado del jardín enciclopédico El Pasatiempo, situado en la zona baja del recinto, acudimos en unión de varios estudiantes del último curso de arquitectura de la Universidad de La Coruña, miembros del Seminario de Estudios Mariñanes y alrededor de sesenta Scouts de Ferrol bajo la dirección de nuestro buen amigo don Francisco Vázquez Fontela, máximo responsable de esta organización en la ciudad departamental, entre los que se encontraba un nieto del exconcejal don Prudencio Martínez Freire, maestro nacional con destino en Betanzos y vecino de la misma, a quienes habíamos rogado su colaboración para proceder a la localización y exploración de varios tramos de las aceras o bordes del estanque, la fuente, cercado, basas y bustos de los Papas, inscripciones etc.
Fruto de esta pesquisa efectuada con apertura de zanjas de hasta veinticinco metros, fue el afloramiento de una parte del circuito de aceras en seguimiento de la disposición lobulada del estanque, decoradas con distintos tipos de piedras tal como recordábamos y que formaban composiciones geométricas en perfecto estado de conservación, la fuente que había presidido el Sagrado Corazón de Jesús totalmente al descubierto entre zarzas y sin ningún género de problemas para su regeneración, el cierre del estanque con sus simétricas crucetas en tramos con barandales y entrecortados de columnas, gran cantidad de basas de los bustos de los Papas con sus inscripciones de identificación en su lugar originario, otras con inscripciones de frases proverbiales y numerosos elementos y piezas sueltas ilustrativas de su época de esplendor.
Los hallazgos ampliaron nuestras expectativas, y éxito garantizado y avalado por las informaciones que teníamos sobre el depósito de escombros sin explanación previa ni posterior, lo que nos permitió no solo salir de dudas sino afirmarnos en la necesidad de luchar por su recuperación, hacia donde encaminamos nuestras inquietudes y gestiones precisas para lograr el compromiso de ayuda económica de una entidad y de otra organización de absoluta solvencia y garantía.
Ocho días después, el 19 de mayo de 1986, dirigimos un escrito a don Manuel Lagares Pérez, alcalde de la ciudad a la sazón, con registro municipal nº 1.217 (el escrito puede consultarse en esta web, bajo el título Estanque de los Papas), además de mantener una conversación sobre los resultados de la investigación y de las gestiones que habíamos realizado ante la Obra Social de la Caja de Ahorros de Galicia y con la delegación de Lions Clubs International en La Coruña, entidades a las que pertenecía como empleado y socio, y que nos brindaban el millón de pesetas necesarios para proceder al desescombro y a la restauración del estanque en cuestión respectivamente, con la única oferta por nuestra parte de agradecer su desprendimiento mediante la colocación de una pequeña placa de agradecimiento en algún lugar del monumento (Véase el trabajo El Pasatiempo de Betanzos: Una oportunidad perdida, comunicación presentada en el XXXIX Congreso Nacional de Cronistas Oficiales de España, Cáceres 2013, publicado en sus actas y también en esta página web).
Pocos días después una excavadora arrasaba con todo y procedía a la explanación de cualquier indicio que pudiera dar crédito de nuestros esperanzadores hallazgos. En el mes de julio del mismo año 1986 se procedió a construir un aparcamiento a partir de la entrada principal, el resto sería destinado para solares con destino al Residencial El Pasatiempo y sobre el Estanque de los Papas se fabricó y estableció un campo de fútbol, para que pudiera distraerse el espíritu de sus santidades en las horas libres. El proyecto del nuevo Estadio Municipal “García Hermanos”, y la maqueta (realizada por don Juan de la Fuente) fue presentada por el alcalde don Manuel Lagares Pérez ante las autoridades provinciales y locales en la Sala Capitular el 10 de abril de 1989. Muy pronto se comenzaron a levantar varios edificios independientes en otras áreas del mismo jardín que no se remataron, y estructuras que se derribaron posteriormente. Claro está, desde hace varios años el ayuntamiento pretende que se lleve a efecto el plan parcial “El Pasatiempo” que incluye el Residencial de su nombre, lo que desvela la intencionalidad de las explanaciones efectuadas por entonces, por decisión del señalado alcalde y de su hermano Antonio, concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, quien a su vez representaba al ayuntamiento de Betanzos en la Comisión Provincial de Medio Ambiente por acuerdo municipal del 3 de mayo de 1985.
En La Voz de Galicia del domingo 21 de septiembre de 1986, se da cuenta de la reunión mantenida en Betanzos por el susodicho alcalde con la directora general del Patrimonio de la Xunta de Galicia, doña Raquel Casal, acompañada del subdirector general y del arquitecto jefe de este departamento, don Carlos Meijide y don Santiago Seara; todo un paripé en el que se abordaron temas relacionados con la recuperación de la Finca El Pasatiempo, habida cuenta de la inoperancia que la Dirección General de Patrimonio mantuvo en relación con esta ciudad y cuyas escasas actuaciones demostraron su ineptitud tanto en el edificio Archivo como en el Palacio del Marqués de Bendaña, el primero convertido en algo así como una plaza de abastos y el segundo desprovisto de su importante contenido y conservando tan solamente la fachada, por poner algún ejemplo:
“… explicando el alcalde que, como paso previo a cualquier actuación, el Ayuntamiento había procedido a contratar varios obreros para continuar las tareas de limpieza de maleza y vegetación silvestre que prácticamente recubren la totalidad del recinto…”.
Claro está que, al mismo tiempo de realizar la limpieza, lo que se hizo fue destruir cualquier resquicio que obstaculizara la conversión del Jardín Enciclopédico en solares y adiós a su declaración como Jardín Artístico de Interés Nacional o cualquier otra por el estilo que preservara su integridad, máxime por haberse ignorado la notificación de la incoación de expediente en tal sentido por parte del Ministerio de Cultura, recibido en el ayuntamiento el 24 de abril de 1981 (es decir, con una antelación de cinco años a su adquisición) y olvidado con los sucesivos cambios políticos.