POR MANUEL GARCÍA CIENFUEGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN (BADAJOZ)
Son elementos tradicionales en la decoración de la arquitectura local montijana. Se pusieron de moda en el siglo XIX bajo cierta influencia andaluza. Los propietarios de las casas eligieron modelos diferentes.
Unas en forma de copa, otras terminando en punta, como queriendo señalar hacia el horizonte, hacia arriba. Otras en forma de bellota. Unas vidriadas, de cerámica, hechas de fábrica… Todavía quedan en algunas edificaciones este elemento decorativo, peculiar; hasta incluso, ahora, en edificaciones modernas o remodelaciones, retoman esta pieza original de la arquitectura local. Es el Montijo que a veces no vemos.