POR MANUEL GARCÍA CIENFUEGOS, CRONISTA OFICIAL DE MONTIJO Y LOBÓN (BADAJOZ)
El 19 de agosto de 1839, Luis Daguerre presentó ante la Academia de Ciencias de Francia su último invento: el daguerrotipo, que permitía capturar una imagen a través de un proceso químico. Ese día también se liberó la patente del daguerrotipo, dando lugar al desarrollo de la fotografía. La fotografía que muestro con motivo de esta conmemoración, la hice en mayo de 2015. Se trata de una vista parcial del claustro gótico (finales del siglo XV) del Real Monasterio de San Jerónimo de Yuste (Cáceres). La severidad del mismo, sus arcos carpaneles, su elegancia y apenas ornamentación, contrasta con el agua que aflora de la fuente que da vida y sonido a este espacio que sabe a recogimiento, serenidad, silencio y paz.