POR PEPE MONTESERÍN, CRONISTA OFICIAL DE PRAVIA (ASTURIAS)
Margarita, madre del ovetense Ernesto Colsa, escritor portentoso, compositor de música desastrosa e intérprete que se atreve con cualquier instrumento, entregó a mi madre, amiga y vecina en Pérez de la Sala, para que me los diera, tres vinilos provocadores, tan redondos como ultrarrealistas, con manifiesto ernestino que anuncia nuevas formas de socavar las creencias del pueblo en su República de las Artes, hacer de la actual erudición tabla rasa, dilatar las estrechas miras de la vanguardia, subvertir el orden estético, abjurar de la técnica y explotar hasta el límite las amplias posibilidades de lo convencional, convencido de que el inmovilismo hará poderosos a él y sus socios.
Escuché los primeros surcos aterradores, jácara rota y desordenada, peor y más inquietante que las cantatas de locura de Hölderlin y su piano mutilado. Álbum de culto, pues, de obligada adquisición, que distribuyen su madre y la mía.
Fuente: https://www.lne.es/blogs/la-mar-de-oviedo/equipo-de-accion-sonora.htmlç