POR ÁNGEL RÍOS MARTINEZ, CRONISTA OFICIAL DE BLANCA (MURCIA)
En la ordinaria de 5 de octubre de 1925 se da lectura al escrito de D. Alfredo Giménez, gerente de la sucursal en Murcia de la Compañía surtidora de gasolina “Uribe S.A.” en la que solicita instalar un surtidor de gasolina y aceites lubricantes en la plaza de Alfonso XIII, frente a la casa nº 4.
. El 5 de octubre de 1930, con asistencia de las autoridades civiles, militares y la mayor parte del pueblo y precedida de las filas de Congregantes de la Aurora, fue llevada en procesión la Imagen de Nuestra Señora del Rosario y colocada en artístico templete para ceñirle a sus sagradas sienes la artística corona de plata y piedras preciosas ofrenda de todas las clases sociales de este pequeño pueblo.
Según las normas del ritual fue bendecida por el señor cura de ésta Licenciado D. Enrique Sánchez Guillén, el cual coronó la Sagrada Imagen en medio del entusiasmo popular que la aclamaba, dando realce a tan espléndida manifestación de fe y entusiasmo, la elocuente palabra del Dr. D. Felipe García Valcárcel, que haciéndose eco de los entusiasmos populares ofrendó la voluntad y los corazones de los blanqueños a la Santísima Virgen del Rosario.
Se celebró a continuación solemne Misa de Campaña con gran devoción de todo el pueblo que llenaba la plaza Mayor.
Era el Hermano Mayor D. Prudencio Soriano.
En la ordinaria de 5 de octubre de 1931 se manifestó que era de urgente necesidad concluir con el espectáculo poco edificante que concretamente se viene dando por la falta de urinarios, lo que es un verdadero escándalo por cuanto las necesidades de hacer aguas obligaba a hacerlo en la vía pública con perjuicio para la salud y para la moral. Por esta causa se propone la construcción de unos urinarios en el sitio llamado boquete de la calle Nueva (hoy Pablo Iglesias) y el otro en la calle del Partidor. Para la construcción de este último ha sido preciso adquirir una pequeña parte de un lavadero de los que existen en dicha calle.