CON JOSÉ MARÍA SUÁREZ GALLEGO, CRONISTA OFICIAL DE GUARROMÁN (JAÉN)
Dedicado a el Cronista de Guarromán Don José María Suárez Gallego
El pequeño ferrocarril de vía estrecha inaugurado en febrero de 1910 con la denominación de «Ferrocarril de Linares a La Carolina y prolongaciones», que unía a estas poblaciones, con un recorrido de 28 kilómetros; tenía como objetivo el transporte de material hacia las explotaciones mineras y el transporte de mineral hacia Linares.
Una vez al día prestaba un servicio de viajeros de ida y vuelta y su tracción siempre estuvo encomendada a locomotoras de vapor.
Una vez pasados los llanos de las concesiones del Collado del Lobo/Santa Teresa, se hallaba, entre el altozano de Guarromán y Martín Malo, el más grande apeadero de la linea: La Estación de Guarromán.
En ella, se encontraba el mayor depósito de agua, que aún perdura, para abastecer del básico elemento a las locomotoras, antes de iniciar el ascenso, entre trincheras, taludes y túneles, a la otra estación madre de La Carolina.